Parla es el único municipio incluido en el Programa Diagnóstico Global del Pequeño Comercio Minorista de la Comunidad de Madrid
El Proyecto ha contado con la participación voluntaria de 134 comercios minoristas de la región
Desde la entrada en vigor de la Ley de Dinamización de la Actividad Comercial se han creado 20.806 puestos de trabajo, según la EPA
La Comunidad de Madrid ha llevado a cabo durante 2016 un proyecto piloto en el que han participado de forma voluntaria 134 comercios de la región. Se trata del ‘Programa Diagnóstico Global del Pequeño Comercio Minorista de la Comunidad de Madrid’, realizado por la Dirección General de Comercio y Consumo con la colaboración técnica de ESIC, la escuela de negocios adscrita a la Universidad Rey Juan Carlos
El objetivo de este proyecto piloto ha tenido una doble vertiente. Por un lado, realizar un diagnóstico y un plan de activación comercial de los pequeños comercios que han participado voluntariamente en el programa, incluyendo trabajos de asesoramiento individualizados para poder establecer las mejores propuestas de mejora relacionadas con su formación, gestión empresarial, adaptación a TIC’s, etc.
Por otro, poder extrapolar los resultados de este proyecto piloto a un Plan de Activación Comercial Global dirigido a las distintas zonas comerciales y al conjunto de los pequeños comercios minoristas participantes.
SEIS ZONAS DE LA COMUNIDAD
La selección de los comercios que se han sumado al Programa se realizó en seis zonas de la región: Avenida de la Albufera, Ciudad de Barcelona y Puente de Vallecas; Paseo de Extremadura, La Latina, Embajadores y Puerta de Toledo; Prosperidad; Villanueva del Pardillo; Parla y, por último, el comercio ambulante.
En el Proyecto se han analizado distintas actuaciones relacionadas con la actividad comercial como las técnicas de escaparatismo, el posicionamiento de los productos en la línea de venta, el flujo de transeúntes en la zona, si el comercio contaba o no como página web y venta on-line, los sistemas de comunicación o las estrategias de fidelización de los clientes.
En total, se han analizado 60 parámetros, cuyos resultados han servido de base para realizar un diagnóstico y elaborar un plan de activación comercial de cada uno de los comercios participantes. Tras haber identificado las necesidades de cada zona/comercio y se ha llevado a cabo una labor de asesoramiento individualizado con cada uno de los 134 comercios con el objetivo de implantar las actuaciones más adecuadas que permitan relanzar sus negocios y mejorar su competitividad.
FINANCIACIÓN DE LAS ACCIONES
Muchas de las acciones correctoras que ha de aplicar cada comercio requieren de financiación adicional por lo que se van a llevar a cabo distintas propuestas como un plan formativo especializado a través de la Unidad de Autónomos de la Comunidad de Madrid, financiación específica a través de Avalmadrid y de líneas de ayudas de la Dirección General de Comercio y Consumo, así como colaboración institucional con entidades financieras.
El Proyecto piloto de asesoramiento al pequeño comercio de la Comunidad de Madrid tendrá continuidad a lo largo de este año, pero tomando en esta ocasión como áreas prioritarias los distritos de Villaverde, Usera y Centro de Madrid capital; la Mancomunidad Sierra Norte, Torrejón de Ardoz y Alcalá de Henares. Además, se realizará seguimiento de las acciones de mejora implementadas por los comercios asesorados en 2016.
LEY DE DINAMIZACIÓN DE LA ACTIVIDAD COMERCIAL
Engracia Hidalgo ha aprovechado la ocasión para presentar también los resultados del «Estudio de Situación del Comercio Minorista Madrileño”, encargado por la Consejería de Economía, Empleo y Hacienda al profesor de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) Pedro Cortiñas.
El análisis ha tenido como objetivo conocer la situación del comercio minorista de la región desde el punto de vista de los propios comerciantes y poder evaluar así, desde su perspectiva, los efectos que ha tenido la Ley de Dinamización de la Actividad Comercial, que vio la luz en junio de 2012 para potenciar la iniciativa empresarial y el emprendimiento.
Así, la mitad de los pequeños comerciantes madrileños (50,1%) consideran que la liberalización de horarios comerciales ha beneficiado a sus negocios, el 28,1% asegura que no les ha afectado negativamente y tan solo uno de cada cinco (21,8%) consideran que el efecto ha sido al contrario.
PREGUNTAS
Los comerciantes encuestados han sido preguntados sobre un total de 21 variables agrupadas en tres grandes bloques: factores de índole económica o macroeconómico, factores del entorno en el que se localiza su comercio y factores relacionados con la propia gestión del negocio.
Las conclusiones del estudio se han extraído de las entrevistas personales realizadas a los propietarios de 245 comercios de todas las actividades sectoriales –alimentación, tecnología, equipamiento de persona y del hogar, cultura y ocio- y de 16 municipios.
SUGERENCIAS DE LOS COMERCIANTES
Finalmente, un último bloque de preguntas fueron dirigidas a cuestionar qué medidas serían necesarias y qué puede hacer la Comunidad de Madrid para mejorar la situación del comercio regional. Así, el 52,2% de los encuestados han propuesto medidas dirigidas a incentivar la actividad, el 25,3% han sugerido medidas proteccionistas y, el 11,8% han solicitado medidas de estímulo de la economía y fomento del empleo.
CREACIÓN DE EMPLEO
La Ley de Dinamización ha superado las previsiones iniciales en cuanto a la creación de empleo, ya que se han creado 20.806 empleos frente a los 20.500 previstos. Además, el número de autónomos afiliados a la Seguridad Social ha crecido un 5% desde entonces. Además, el empleo creado es estable y de calidad, ya que el 79,3% de los trabajadores del sector minorista tienen un contrato indefinido.
Además de aumentar el empleo, han aumentado las ventas en el sector, como así lo reflejan los últimos datos conocidos del ‘Índice de Comercio Minorista’ del mes de diciembre y que sitúan el incremento en un 4,6% con respecto al mismo mes del año anterior.
Hay que reseñar a su vez que la Ley cuenta con un alto grado de satisfacción por parte de los consumidores, como así lo refleja un estudio de la Dirección General de Comercio y Consumo realizado por la UNED en 2014 y que constata que el 68% de los encuestados consideran que la libertad de apertura es beneficiosa para los consumidores.
