No sólo es la Nissan y otras muchas empresas las que se marchan de España, También el dinero y la juventud y los universitarios y nuestros técnicos. Se marchan nuestros médicos, nuestras enfermeras y nuestros investigadores. La juventud mejor preparada de toda la historia, gracias fundamentalmente al esfuerzo de suspadres, huye de España. La falta de perspectivas, de ilusión, de futuro profesionalestá empujando a nuestros jóvenes y a nuestros profesionales a que se vayan.
Un país sin juventud y sin ilusión es un país sin alma. Según las últimas encuestas el 70 % de nuestros médicos y sanitarios estarían dispuestos marcharse a otro país. No es cuestión económica, que también lo es. Es la consideración social, el aprecio, es el agradecimiento, que no existen, lo que los echa de España Los aplausos a las 8 de la tarde, ¡que pronto se los ha llevado el viento¡ El reconocimiento de la sociedad hacia esos héroes contrasta con el desprecio de todas las autoridades españolas hacia los mismos. Personas que se han estado jugando la vida por salvar las de otros son despedidos sin la menos consideración en el momento que ha remitido un poco el riesgo. El Gobierno de Cataluña, está pidiendo ahora urgentemente médicos y sanitaros para Lérida. ¿De dónde los sacarán? El desprecio con desprecio se paga.
La pandemia nos ha enseñado muchas cosas, y creo que es verdad, pero también es verdad que por mucho que nos haya enseñado, “los españoles no hemos aprendido nada”.Mientras las colas en busca de alimentos son cada vez más largas, los políticos siguen sin enterarse de que es necesario suprimir gastos inútiles y de que son ellos los que tienen el deber de atender a los necesitados, no las instituciones benéficas. Mientras tenemos 5 millones de parados, tienen que venir personas de fuera para recoger la fruta de nuestros campos. Mientras hablamos de un sueldo mínimo vital, y me parece muy bien, nadie habla de la obligación de un trabajo mínimo vital.
España huye hacia Europa. ¿Seguiremos dudando aún para qué sirve la UE? Nuestro orgullo nacional nos impide reconocer que como país hemos fracasado, No echemos la culpa al coronavirus. Este sólo ha hecho que descubrir nuestras vergüenzas. No es Europa la que debe presentarnos un plan de reestructuración, somos nosotros los que debemos hacerlo. No podemos estar cada dos años pidiendo una limosna a las puertas de Europa. ¿De dónde van a salir los miles de millones que Españanecesita para las pensiones, para los parados, para las ayudas sociales, si no hay juventud que trabaje?
No es solo la juventud la que se marcha, España entera se fugaría de esteambiente crispado y de intolerancia provocado por la clase o casta política.España se fuga, sí, porque con nuestra juventud, con nuestros universitarios con nuestros sanitarios, con nuestros investigadores se va gran parte de lo más valioso que tenemos.
El desprecio a la inteligencia, al esfuerzo, a la solidaridad a la igualdad, a la reconciliación, a todo esto, que al menos teóricamente representa la UE ha sido una constante de nuestra políticadurante los últimos años. Mientras nuestros valores se marchan a Europa, España, se fuga de Europa y de los valores que representa la UE.