Sara Hernández y Herminio Vico
Sabe poner sonrisas y poco más. Más allá, claro está, de obedecer a quien le debe el puesto, a la traidora Sara Hernández. Es Herminio Vico, hoy teniente de alcalde y posicionado en las listas del 26M como segundón de Hernández. Es su hombre de paja. Un fiel delfín con bandera de ‘sí, bwana’. Un ‘chico bueno’. Aquí, Herminio, nos hemos portado bien, puesto que se trata de un sesentón. En cualquier caso, un responsable de Centro Cívico venido a más. Es cierto que tiene pocas, por no decirme ninguna, dotes de oratoria. Le cuesta enhebrar una locución acertada. No obstante, esto no le imposibilita, o no debería, las sacudidas al corazón de la empatía para con, al menos, sus vecinos y vecinas.
Este miércoles, Sebas Rodríguez, vecino de 48 años y con un grado de discapacidad del 67%, era tratado con violencia por parte de la policía local. Él mismo lo denunciaba públicamente a través de las redes sociales: “Aquí estoy, en la puerta del Ayuntamiento, solo, sin nadie. Luchando contra un policía municipal, que me está tratando de la manera MÁS VEJATORIA, que he sufrido en TODA MI VIDA…“. La historia de esta especie de rambo local también la ha recogido este medio.
No es la primera vez que nuestro ‘rambo local’ [de frente con la cara difuminada] protagoniza una escena violenta en el hall del Ayuntamiento. Es más que conocido por sus actitudes sin que al parecer nadie le pare
Sebas se encuentra tirado como un perro. No sabe qué será de su vida y el Ejecutivo de Hernández se viste de avestruz cuando pasa por su lado. Tanto es así que su jefe de Prensa, a quien lo tiene realmente en las funciones de Comisario político, se lava las manos. Fabio Expósito, sin más experiencia profesional reseñable, y quien hace cuatro años acompañaba a Hernández a sus actos de campaña para intentar hacerse con el cargo, sentencia que se le envíe un correo cuando se pregunta por Sebas y los planes del Consistorio. Lo dice quien, bajo mandato expreso de su jefa, la traidora, ha capado a este periódico las notas de prensa. La mínima expresión de comunicación para con un medio, lesionando de pleno un derecho fundamental, el de la información.
Pero no todo queda aquí. Mientras Sebas, toda vez recibido ese “vejatorio trato“, que ha sido corroborado por asociaciones del municipio, ya estaba tendido en el duro suelo de la calle, Herminio Vico pasaba por allí. nuevocronica.es le ha pedido un minuto para conocer su impresión sobre este caso.
Herminio Vico, el cobarde, ha huido literalmente. Se ha escudado en la excusa más errática, pero propia de su nivel. “Tengo una reunión, tengo una reunión“, mientras ponía una sonrisita. Se esfumaba el teniente de alcalde mostrando su gran preocupación. ¿No podía aguantar un minuto la reunión? A los policías les concedió cinco, por lo menos, antes de nuestra petición.
Herminio no da más de sí, y obedece a su jefa. Es cierto. Pero no es menos cierto que es un buen hombre. Por eso, seguramente, cuando él esta noche duerma en su cama la conciencia le pinchará.
