Lobo gana a la burocracia y a las directrices emanadas del Registro Civil central. Lobito será Lobo. Ñako Javierre y María han ganado la batalla tras salir en casi todos los medios de comunicación y conseguir en pocos días casi 25.000 firmas en la plataforma www.change.org. El director general de los Registros y del Notariado, Javier Gómez Gálligo, ha anunciado este miércoles que tiene la intención de admitir Lobo como nombre para un recién nacido, tal y como han pedido sus padres.
Gómez Gálligo, ha adelantado que esta será su decisión cuando los padres del bebé recurran ante esta instancia del Ministerio de Justicia la negativa del Registro Civil de Fuenlabrada a ponerle Lobo de nombre al considerar que se trata de «un apellido común» en España.
Según una resolución de 2005, no se puede poner como nombre un apellido, con lo que, según Gómez Gálligo, el responsable del Registro de Fuenlabrada «no ha actuado mal, sino que ha seguido el criterio establecido por la propia Dirección General, que es la que ahora va a cambiar el criterio».
Y lo hará, según ha explicado, porque cree que «los usos sociales lo están convirtiendo en nombre y mucha gente se lo ha puesto de segundo para evitar la prohibición».