► Javier Alcolea y Enrique Herrero denuncian algunas prácticas [obscenas] de Ahora Getafe, su propio grupo municipal
Como anunció esta revista, en el mes de septiembre se producía la ‘voladura’ incontrolada y a ‘pro-POSI-to’ de Ahora Getafe, los dos ediles del Partido Obrero Socialista Internacionalista [desintegrados o desvinculados], Javier Alcolea y Enrique Herrero, siguen con su política de enfrentamiento con los otros cuatro ediles estalinistas de Ahora Getafe. Los del POSI ya se saben fuera de la institución municipal y están aprovechando lo que resta de legislatura para atizar cuanta más leña sea en la hoguera de los podemitas.
Entre sus [sorprendentes, por lo inaudito] iniciativas está apoyar los presupuestos ‘socialdemócratas’ de Sara Hernández y criticar las propuestas de sus ‘camaradas’ de grupo [eso sí es lógico] asegurando que «se han colado algunas tan controvertidas como obligar al Ayuntamiento a asumir competencias que corresponden a la Comunidad de Madrid» ante la propuesta de construir un colegio en Los Molinos con fondos municipales. No conocen o se olvidan los trotskistas de la cantidad de colegios públicos que construyó el ayuntamiento de Getafe durante el mandato del socialista Jesús Prieto [con otras fuerzas de izquierda] y de Pedro Castro. Y no pasa nada. Getafe no se quedó sin colegios por culpa de Adolfo Suárez, leñe. Es la memoria desmemoriada de Sara Hernández y de sus nuevo colaboradores necesarios, los trotskistas del POSI getafense.
Los dos ediles díscolos también han criticado la falta de participación y de transparencia de Ahora Getafe. No será nueva, de los últimos meses, esa crítica perversa y a destiempo de los Ahora Rebeldes con la falta de participación de los colectivos… Aunque, sin duda, han reservado parte de su munición de más calibre para criticar el uso de la asignación municipal que se pulen.
Los dos ediles del POSI han querido ‘desvincularse’ de las tretas y maniobras de sus camaradas, sobre todo, en lo referente «al gasto de la asignación municipal y a las decisiones políticas que de ello se deriven».
Alcolea y Herreros se refieren a la encuesta encargada por Ahora Getafe «para conocer las necesidades de la ciudad»; en realidad —como denuncian los dos ediles—, una forma de hacerse una encuesta electoral a costa del dinero público, aunque desde el grupo morado y los [inexistentes ya] ‘circulos’ o confluencias de no se sabe qué lo han desmentido; dicen que de los 10.000 euros que ha costado la encuesta, solo 8.000 —los que afectan a la realidad del municipio— se han pagado con la asignación municipal. Los otros dos mil, afirman, los ha puesto Podemos. ¿Y de dónde saca ‘pa’ tanto como destaca, que diría el cuplé?
Además, cosas del entrismo, los trotskista han denunciado el uso de fondos públicos —por lo menos 3.000 euros al mes— para la edición de un periódico por parte de una ‘nuevo’ grupo empresarial. Herreros y Alcolea han recordado que Ahora Getafe presentó en diciembre de 2016 una moción en contra de la adjucación ‘a dedo’ de contratos menores [algunos de repetitivos y desorbitados] a periódicos locales afectos al régimen de Sara Hernández; y han concluido que la iniciativa de Ahora Getafe les parece «obscena, por innecesaria y desorbitada». Razón que tienen.
Viva lo público [sobre todo el dinero] para hacer cosas [publicidad y propaganda] para el pueblo, y así, mantener el sillón. ¿Eso no era una característica de la antigua política? ¿No es eso mismo lo que hace Sara Hernández con sus amigos y amigas? Algunos se pasan la vida criticando hasta que les cae la pedrea. Pan para hoy, hambre para mañana.
Gastos de los Grupos políticos
El Pleno del Ayuntamiento celebrado el pasado día 7 de febrero aprobó con cinco votos y 22 abstenciones una propuesta de la concejala no adscrita Mónica Cerdá, como figura interpuesta, para que los grupos municipales justifiquen la asignación económica que tiene todos los años. Yendo por libre, es fácil. La moción fue presentada por Cerdá a iniciativa del partido local Impulsa Getafe, sin representación municipal. Votaron a favor, además de la edila figurante, los dos representantes de Ciudadanos y los dos ediles díscolos de Ahora Getafe.
Estos gastos, fuera del control de la Intervención municipal, s on el cajón de sastre de los grupos políticos municipales. A pesar de su aprobación, la moción quedará —seguramente— en papel mojado, al igual que otras resoluciones del Pleno municipal, que a lo visto, solo sirve como escaparate de las disputas de los partidos y ediles, y como justificación de las asignaciones y otros emolumentos. Cerdá, en su exposición, manifestó que «existe la obligación legal de destinar los fondos recibidos para el funcionamiento del grupo municipal y justificarlo documentalmente ante el Pleno cuando le sea requerido, así como a reintegrar las cantidades no gastadas». Risas. Detrás del telón que oculta el teatrillo municipal se oyen grandes risotadas.
Los grupos políticos se reparten, en función del número de ediles, una cantidad que para los años 2016, 2017 y 2018 asciende a 178.600 euros [por año].
