► El [presunto] comunista Rubén Bejarano avaló el pago a los empresarios liberales mientras sube el paro en Leganés
► Este evento, celebrado en la finca Solimpar, no ha tenido rédito alguno en la población leganense
► El Ayuntamiento de Leganés subvenciona siempre al 100% las costosas actividades de UNELE
Vuelven las arcas municipales, aquellas provistas del esfuerzo de los contribuyentes, a destinar miles de euros a eventos de UNELE, por UNELE y para UNELE, la Unión Empresarial del municipio alcanzada y salpicada por varias y distintas polémicas. Sin ir más lejos, la más reciente ilustra sobremanera en qué situación se encuentran, la semana pasada dimitía un directivo de esta entidad, Florentino Gutiérrez, y, misiva abierta mediante, dejaba claro sus diferencias con el presidente, Augusto Fuentes, y las artes de éste.
UNELE, acusada por sus propios miembros de presidencialista, sin auditoría de sus cuentas, sin conocimiento de cómo se elige al presidente, recibe inyecciones de centenares de miles de euros públicos. Éstos los destinan para sus eventos.
Ninguno de ellos ha tenido el mínimo rédito en quien los ha pagado, la población de Leganés. La fiesta con la que UNELE cerró el año 2017, a finales de diciembre, fue la entrega de sus premios; una cita de ellos con ellos y festejada en la Finca Solimpar. Este periódico se puso sobre la pista cuando, en los primeros compases de 2018, José Carlos Monge, dueño de Solimpar, empresa que gestiona aledaños para UNELE, nos afirma, en exclusiva, que en relación a los premios de UNELE del 20 de diciembre “hay una factura y lo paga el Ayuntamiento de Leganés a Solimpar porque ha sido quien alberga esto. Lo de los premios de UNELE lo he facturado al Ayuntamiento. Lo que costó no sé si puedo decírtelo, de todas maneras será público”. Es evidente que el paso restante era conocer por cuánto. Efectivamente, Monge tiene razón en una cosa, en que ha de ser una cantidad pública porque es dinero de la ciudad. Sin embargo, el Ayuntamiento de Leganés no entiende las cosas de esa manera.
Bejarano y Jordán “nunca están”
200.000 euros del erario en general, más de 55.000 en una sola jornada para un evento de charlas de 100 euros públicos el minuto, solamente 7.000 euros de todos los ciudadanos en cócteles, 3.000 euros de una empresa pública como otra de la inyecciones a UNELE… ¿Y en los premios de 2017? Un partido de la oposición deslizó que, según había podido conocer, esta última edición habría costado 7800 euros. Así las cosas, este periodista se puso en contacto, vía oficial, con el edil de Desarrollo Local y Empleo, Arsenio Rubén Bejarano Ferreras, para contrastar el dato. Como lamentablemente, llevamos varias ocasiones de demandas de informaciones públicas sin respuesta por parte del Ayuntamiento de Leganés, al final de la comunicación indicábamos que si en un plazo razonable, de 48 horas, no obteníamos la corroboración de la cuantía o, por el contrario, la expresión de la correcta, dábamos por hecho que, al menos, ese dinero púbico se gastó en un evento para empresarios liberales que, entre otras cuestiones, defienden el despido libre. Por cierto, el paro ha ascendido en Leganés en el último mes. Por último, y paralelamente a esto, igualmente, y se puede probar, este periodista ha llamado en varias ocasiones a la delegación de Bejarano. Él o su auxiliar, la eterna cargo de confianza Manuela Jordán, nunca estaban. A esta última, las funcionarias le dejaban nota, pero nunca nos devolvió la llamada. El correo oficial a Bejarano fue enviado el 29 de enero, es decir, finalmente, más allá de los dos días, ha pasado una semana.