Ella es María —Mari para los que la conocen—, una de las mujeres que hace posible Cáritas Pinto, una de las organizaciones pinteñas que día a día, con alimentos, ropa y talleres, ayuda a muchísimas personas que lo están pasando mal.
María, además, es la responsable de acudir tres veces por semana al hipermercado E.Leclerc Pinto donde, desde hace tres años, recoge decenas de kilos de alimentos y enseres para que Cáritas pueda seguir ayudando a estas personas. Leche, legumbres, galletas, zumos, yogures, pizzas o incluso carne, son donados por el hipermercado E.Leclerc Pinto a Cáritas semana tras semana, todos los lunes, miércoles y viernes, cuando acude María, acompañada de voluntarios, para cargar los alimentos en sus coches y llevarlos hasta su sede, en la Calle Terreros número 6.
“E.Leclerc nos ayuda muchísimo”, dice María, “gracias a los productos donados por el hipermercado E.Leclerc Pinto atendemos semanalmente a más de 50 familias”. “Para nosotros la aparición de E.Leclerc Pinto ha supuesto el todo”, comenta María emocionada, “con sus donaciones podemos alimentar a muchas personas sin recursos; nosotros no tenemos un Banco de Alimentos así que sin su ayuda este reparto se nos haría muy difícil”.
Todo el equipo de E.Leclerc Pinto trabaja por y para Cáritas en lo que puede, pero María se lo agradece especialmente “a Aroa, Juanfran, Sandra, Susana, Montse y por supuesto a Laurent Martín, propietario del hipermercado”. “Laurent nos ha dicho tanto a todo que sí desde el principio que llegué a pensar que no me entendía”, dice riendo María, “ahora comprendo que tiene un corazón muy grande, igual que el resto del equipo que forma este hipermercado”.