♦ La medicina biorreguladora puede suponer un herramienta terapéutica muy útil ya que permite dar solución a problemas comunes de la salud familiar. de forma integral: un mismo medicamento puede servir para todos los miembros de la casa y aplicarse en diferentes patologías, debido a que actúa sobre los mecanismos relacionados con el sistema inmune. Así lo concluyen los expertos reunidos en las Jornadas de Biorregulación en la Oficina de Farmacia que se han celebrado en Madrid y Barcelona, organizadas por los Laboratorios Heel.
La medicina biorreguladora se presenta como nexo de unión entre la homeopatía clásica y la medicina convencional. Así, partiendo de la experiencia terapéutica de la homeopatía clásica, incorpora los avances de las ciencias médicas para obtener como resultado medicamentos de nuevo desarrollo.
Los medicamentos con acción biorreguladora se componen de diferentes principios activos de origen vegetal, orgánico y mineral en concentraciones bajas, equivalentes a las de los mediadores del sistema inmune con acción rápida y eficaz, que estimulan los mecanismos de autorregulación del organismo para ayudarle a combatir las enfermedades y recuperar su equilibrio biológico.
Estos medicamentos pueden encontrarse en la farmacia en forma de comprimidos, pomadas y gotas. “Esta mejora del sistema inmunológico hace que también resulten eficaces para abordar un amplio espectro de patologías y, además, están avalados con estudios científicos”, comenta Laura Monzón, farmacéutica experta en seguimiento farmacoterapéutico, que ha participado en la jornada de Barcelona.
Para determinar el tratamiento el problema se aborda en función del órgano o tejido afectado. Para un mejor tratamiento es recomendable llevar a consulta las pruebas de diagnóstico recientes, como analítica, radiografías, ecografías, etc., así como los informes médicos de que se disponga.
Entre las patologías más frecuentes atendidas en la oficina de farmacia y que pueden ser abordadas con medicina biorreguladora se encuentran «las alergias, las gripes y resfriados, tanto para prevenir como aliviar los síntomas y acortar su duración; dolor agudo y crónico, —como el de espalda—, rinitis, sinusitis, aumento de las defensas o trastornos del sistema nervioso”, afirma Monzón. Estos medicamentos “no tienen efectos secundarios ni interacciones con otros fármacos, lo que da mayor tranquilidad al profesional y proporciona mayor satisfacción entre los pacientes, lo cual resulta gratificante”, explica.
El profesional farmacéutico, “dado su contacto diario y continuo con el paciente, es quien debe dar a conocer los beneficios que aporta la medicina biorreguladora”, comenta Monzón. Entre las herramientas que les pueden servir para ello están las redes sociales. “Representan una forma muy potente de comunicación con el paciente, y permite no sólo dar a conocer esta área terapéutica, sino mostrar los valores de la farmacia, su especialización y los productos, ofertas y servicios que ofrece”, expone.
