La Comisión Ejecutiva de IU de la Comunidad de Madrid (IUCM) ha acordado rechazar que los últimos cinco coordinadores de la federación madrileña deban dimitir por el caso de Caja Madrid y el uso de tarjetas opacas.
La Presidencia Federal de IU aprobó el lunes una resolución en la que pedía el cese de los últimos cinco coordinadores de la federación madrileña. Entre los implicados están el portavoz en la Asamblea de Madrid, Gregorio Gordo, el actual ‘número dos’ de la federación, Miguel Reneses, y el portavoz en el Ayuntamiento de la capital, Ángel Pérez. Todos ellos fueron coordinadores de IUCM durante los años en los que se fraguó el escándalo de las tarjetas de Caja Madrid y, por ende, «los principales interesados en ocultar los resultados de una investigación que, —según fuentes de la coalición—, los implicaría directamente».
Los tres consejeros de Caja Madrid a propuesta de IU fueron José Antonio Moral Santín, Juan Gómez Castañeda Rubén Cruz y José Luis Acero, que ya no militan en la coalición. Por ello, el fin último de este proceso de depuración interna, según señalaban estas mismas fuentes, pasaba por ir más allá que el resto de partidos implicados en el escándalo: “Mientras ellos están echando de sus filas a los titulares de las tarjetas, nosotros pretendemos buscar responsabilidades en quien pudo haber sido cómplice porque a los consejeros ya los apartamos hace mucho tiempo. No es verdad que nadie supiese lo que estaba pasando”. Aunque, la depuración en el organigrama, vista desde los partidarios de Gordo y Pérez, es una ‘vendeta’ política.
La única persona a la que se ha pedido el cese es el diputado Antero Ruiz, el chivo expiatorio que según apunta el candidato a las primarias de IUCM, Julián Sánchez, “era el delegado de los coordinadores, por lo que las responsabilidades, si las hubiere, tendrían que estar en el nivel superior”. El propio afectado se defendió tildando su expulsión como un “sacrificio” con el objeto de cerrar en falso la investigación interna y esconder a los verdaderos responsables políticos, que hoy en día siguen ocupando cargos de la dirección del partido.
El “sacrificio” del diputado regional no fue suficiente para Lara ni para el resto de la ejecutiva federal, que aprobó por mayoría, durante una reunión de urgencia, la petición de expulsión de los coordinadores de IUCM durante los años en los que el partido participó en la gestión de la caja madrileña. Más bien, se interpretó como una tomadura de pelo, sobre todo después del tono de las acusaciones vertidas en un encuentro de la dirección federal de IU del pasado mes de octubre que no dejó lugar a dudas sobre la unanimidad interna respecto a la intención de depurar responsabilidades políticas.
La Comisión Ejecutiva de IUCM explica, según un comunicado de resolución, que a la formación le parecen «inaceptables las propuestas de actuación incluidas en la resolución de la Presidencia Federal, por no fundamentadas, carentes en su conjunto de criterios racionales, objetivos y documentales».
El portavoz de IUCM considera que, en contra de lo que se quiere pretender, la decisión federal «solo puede provocar la ruptura interna e impedir que se den los cambios necesarios y que se den de forma unitaria, garantista y responsable»
Sostiene que es el «peor escenario» de cara a los retos que esperan a IU, en una coyuntura «muy compleja». «Se ha lanzado una imagen a las federaciones trasladándolas una impresión inmovilista e irresponsablemente injusta de IUCM», añade.
Explica que IUCM tenía y tiene previsto afrontar sus procesos de forma acordada, con el fin de aumentar el impulso político de la organización, de cara a los retos de los próximos meses, acabado el proceso de primarias, y que sería «irresponsable» tomar dichas decisiones en pleno proceso de primarias abiertas.
«Pretendemos que este proceso se desarrolle con la máxima normalidad posible y garantizaremos que así sea», agrega.
IUCM reitera su firme apoyo a las conclusiones de la Comisión de Investigación de Madrid, «que seguramente, debido al excesivo celo, no se ha gestionado adecuadamente, y a las decisiones de los órganos de dirección de la federación.
«Cualquier medida que se pretenda imponer a la Federación de Madrid, está destinada al fracaso y a no ser implementada, dada la ausencia de soporte estatutario federal y madrileño», añade la nota.
Por todo ello, exige una inmediata reunión con la Dirección Federal, con el fin de poder aportar la documentación pertinente, que demuestra por qué es inaceptable la decisión tomada por IU-Federal.
Tras apuntar que esta reunión debería haberse solicitado por parte de la Dirección Federal, antes de tomar sus decisiones, señala que por ello cree que es fundamental que se inicien los trabajos conjuntos entre ambas direcciones.
«Plantear la dimisión de responsables políticos máximos a lo largo de dos décadas, hace tabla rasa de la vida política de IU en esta Comunidad, ignora que en esos años esta federación fue soporte clave de IU en su representación institucional y traslada a la ciudadanía un mensaje que solo puede perjudicar a IU, cual es que durante todo este tiempo se han estado equivocando con su voto», sostiene la Comisión Ejecutiva de IUCM, que lo considera «sencillamente inaceptable».
La Ejecutiva madrileña propone que todos sus miembros, coordinadores, portavoces institucionales en todos los ámbitos, así como secretarios, presidentes y gerentes de Fundeste, comparezcan ante la Comisión de Transparencia «como muestra de nuestra voluntad de colaboración».
«IUCM exigirá que la dirección federal reflexione, respete los plazos y decisiones que en función de las normas estatutarias le son propios», concluye la nota.