La novela refleja situaciones que pasan en nuestra sociedad
Leer un libro se está convirtiendo en un acto de rebeldía
La edición ha entrado en crisis y lo ha hecho para quedarse
Chema Rivero (1969) es vecino de Leganés y un valiente de los que publican libros y se atreve a poner en marcha una editorial. Se licenció en Geografía e Historia en la Universidad Complutense de Madrid. Desde 1997 trabaja en diseño gráfico y comunicación. Fue uno de los autores que estuvo firmando en la Feria del Libro de Leganés.
Hace unos meses vio la luz su primera obra, Enemigos del hombre. Una novela del género fantástico donde la raza humana se queda seriamente amenazada. Fue hace dos años cuando comenzó con Cruce de tiempos, su editorial. Chema Rivero encarna todas las perspectivas del mundo del libro. Por eso, en este 23 de abril, se hace ideal conversar con él sobre su novela y sobre lo divino y lo humano del amplio espectro del universo del libro.
P: ¿Cómo empieza tu relación con la escritura?
R: Recuerdo haber escrito siempre o, al menos, haber inventado historias. Recuerdo perfectamente la fascinación que me producían las historias que leía y como, desde muy pequeño, quería inventarme las mías. Inventaba cuentos, que ponía por escrito, donde los protagonistas eran los madelman que mis hermanos y yo nos habíamos pedido para Reyes. La idea era reproducir después esas historias cuando tuviéramos los regalos. Creo que ésa es mi primera relación con la escritura. Yo debía tener unos ocho años…
P: ¿Se trata de tu primer libro?
R: No se trata del primero que escribo. Pero, sí del primero que he considerado que valía la pena leer.
P: ¿Por qué optas por el género fantástico? ¿Qué oportunidades te ofrece como escritor este registro?
R: Para mí, el género fantástico o el de ciencia ficción son el escenario perfecto. Puedes poner a los personajes en situaciones límites y especular sobre cómo responderían bajo esas condiciones. Para explicar esto, se me ocurre mencionar la obra de Aldous Huxley de “Un mundo feliz”, donde el autor pone al lector frente a dilemas morales que la fantasía le ha permitido poner en primer término y visualizar de una forma clara y contundente.
P: ¿Cuál es el germen de esta historia?
R: Uno de mis temas recurrentes ha sido siempre la lucha entre el pensamiento racional y cualquier tipo de pensamiento irracional, mágico, etc… Toda la historia de mi libro orbita en torno a esa idea. Mi fuente de inspiración es la Historia.
Una historia de magia y ciencia ficción
P: Comienza el libro con un mapa de la península de Estilia…
R: Para mí son imprescindibles los mapas. En cualquier curso o lectura que haces sobre cómo escribir, te dicen siempre que escribas sobre un tema que conozcas bien. Yo escribo sobre los mundos y personajes que invento y tengo la necesidad de convertirlos en algo tangible. Eso suponen los mapas para mí. Además, cuando escribes sobre un mundo inventado es fácil que, si no lo tienes a la vista, te contradigas y cometas errores tontos. También es muy válido para el lector.
P: En el libro contaremos con varias razas…
R: En la trama de mi historia era imprescindible que existieran distintas razas. Es una manera de visualizar cuestiones que me venían muy bien para dejar más claro por dónde quería que fuera la novela.
P: La raza humana está amenazada en la historia. Aunque contará con sus aliados, ¿será complicado que sobreviva?
R: Sí, para los hombres siempre es complicada la subsistencia. Sobre todo porque su peor enemigo está siempre más cerca de lo que nunca podrá estarlo su mejor aliado.
P: ¿Cuál será la importancia de los gremios en el desarrollo de la historia?
R: Representan el conocimiento científico y la necesidad, que deberíamos tener todos, de mejorar poco a poco las condiciones de vida de todos los seres humanos; independientemente de los sentimientos religiosos de cada uno.
P: Se habla también de una ciencia en decadencia…
R: El tono nostálgico que da la sensación de pérdida me interesaba también como trasfondo de la historia.
P: El fanatismo será, en cierta medida, protagonista. Fuera de la ciencia ficción, en la realidad, también acusamos de ciertos fanatismos que llegan a destruir…
R: La Historia nos ha demostrado que los fanatismos, de cualquier signo, han conducido al hombre a las peores catástrofes. Lo primero que siempre han destruido los fanatismos ha sido la dignidad humana. Bajo estos fanatismos, la vida humana, que debería ser lo más sagrado, pasa a no tener ninguna importancia.
P: A pesar de ser un género fantástico, ¿se reflejan situaciones que podrían suceder en nuestra sociedad?
R: Creo, sinceramente, que la novela refleja situaciones que pasan en nuestra sociedad.
P: No podemos destripar mucho pero, un hallazgo del pasado ayudará a las razas del futuro de la península, ¿no?
R: Sí. Un hallazgo que se llevará a cabo gracias a unas investigaciones que los gremios realizarán y que tienen que ocultar a las autoridades.
P: ¿Cómo son los personajes? Tenemos a Sabandija, Helan…. ¿Hay tono de humor en alguna ocasión?
R: Sí. He querido que la novela tuviera algunos toques de humor. Pero, en literatura pasa como en el teatro que dicen que es más difícil hacer reír que llorar. Para mí, es de lo más difícil de reflejar y eso que considero que soy una persona con sentido del humor.
P: ¿Qué hay de Chema en el libro? Toda obra, al final, lleva algo inherente de su autor….
R: Para construir un buen personaje tienes que meterle mucho de ti mismo. No es necesario que se parezca a ti pero, sí tienen que ser familiares sus preocupaciones, miedos, ambiciones…. Creo que estoy, en este libro, muy presente. Pero, muy repartido entre todos los personajes, también en los rankog (raza bestial que busca acabar con los hombres).
P: ¿Qué estilo nos encontraremos?
R: No soy muy descriptivo. Creo que mi literatura es ágil porque a mí me gusta que pasen muchas cosas, que los personajes actúen y que sea mediante esta actuación que los lectores lleguen a conocerlos.
El mundo editorial, en crisis
P: ¿Cómo está el mundo de la edición? ¿Cuesta mucho?
R: Mal. Aunque en esto creo que también nos parecemos al teatro cuando se dice que está en una eterna crisis de la que no sale. Creo que la edición ha entrado en crisis y lo ha hecho para quedarse. Le estamos pidiendo a la gente que dedique unas horas a leer y reflexionar y poner su cerebro en movimiento cuando toda la mercadotecnia de la sociedad está ofreciendo lo contrario. Ahora, para que un entretenimiento tenga éxito, la inmediatez tiene que ser un ingrediente imprescindible. Leer un libro se está convirtiendo en un acto de rebeldía.
P: Y, ¿la autoedición?
R: En muchos casos es la única salida para poder ver plasmado un trabajo muy sacrificado. Para algunos autores sí empieza a ser más interesante la autoedición. De todas formas, con la impresión digital y lo ajustado que pueden ser ahora las tiradas, son una opción más barata de lo que la gente piensa, siempre y cuando no den con alguien que se quiera hacer rico a su costa. La gente tiene que tener claro, y yo es lo primero que les cuento cuando se acercan a Cruce de Tiempos, que el cliente de una editorial tradicional es el lector. Su negocio está en vender libros a los lectores. En una editorial de autoedición, el negocio está en vender libros al autor.
P: Has creado la editorial Cruce de Tiempos, ¿cómo marcha y qué objetivos tienes?
R: Me encanta el mundo del libro. Mi objetivo: adentrarme en el mundo del libro desde la perspectiva que me faltaba y que me atraía mucho, la de editor.
Por otro lado, estoy muy agradecido al hecho de poder conocer gente interesante y si, además, todo ello me reportaba un beneficio económico, mejor que mejor. Pero, yo vivo de mi trabajo como diseñador gráfico y eso me da la tranquilidad que no tienen las personas que intentan vivir de lo que ganan como editores.
¿Cómo marcha? Mal. Me animé a ponerla en funcionamiento por unas ayudas que te ofrecían los 18 primeros meses de funcionamiento. Pero, la ayuda ya está a punto de terminarse y mi objetivo es conseguir la autofinanciación de la editorial. Si no lo consigo, echaré el cierre y me llevaré un buen recuerdo y un buen número de nuevos amigos, espero.
P: ¿Cómo fue la experiencia de estar en la Feria del Libro de Leganés?
R: Conocer a otras personas que están en el sector siempre es interesante. Además, gracias a las redes sociales, se acercaron a verme amigos que hacía mucho que no veía. Sólo por eso ya habría valido la pena. La venta, como cabía esperar, floja.
P: Por último, ¿qué planes tienes para este 23 de abril?
R: Actúa, en la Iglesia de El Salvador de Leganés, Luis Delgado (los músicos de Urueña) a las 20h. Un viejo amigo de mi familia y siempre que puedo, me acerco a verlo. Si tienen la oportunidad no se lo pierda, no se arrepentirán.