Se podrán realizar visitas de 11:00 a 20:00 de manera ininterrumpida
♦ El Hospital Universitario de Getafe ha implantado un programa de Puertas Abiertas para las visitas de familiares de los pacientes ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), de 11:00 a 20:00 horas de manera ininterrumpida, «con el objetivo de mejorar el acompañamiento, el bienestar y la confortabilidad de pacientes y familias, cuidando especialmente sus demandas personales y emocionales».
Hasta ahora existían dos horarios de visita para familiares y allegados, de 13 a 14 horas y de 19 a 20 horas. La nueva medida amplía las visitas y flexibiliza su horario, de forma que se puede conciliar mejor con la vida familiar y laboral y se humaniza más la atención, dando respuesta a una demanda de los propios usuarios del centro sanitario.
Con el nuevo programa, hasta 2 personas pueden ver simultáneamente al paciente, exceptuando los momentos en que los profesionales sanitarios estén realizando alguna técnica o cura especial al paciente. En estos casos, se solicita a los familiares que salgan, tras lo cual puede continuar la visita.
La implantación de esta medida ha implicado cambios organizativos y de funcionamiento de la Unidad de Cuidados Intensivos para garantizar en todo momento la intimidad de las familias y la confidencialidad de la información clínica.
Beneficios en la recuperación del paciente
Este cambio ha sido demandado además por la Comisión de Calidad Percibida, que ha expresado la necesidad de «abrir» las puertas de la UCI, liberalizando el horario de visitas y mejorando los cuidados personales y emocionales por parte de la familia, lo que se ha demostrado es beneficioso para la recuperación del paciente.
El nuevo programa de Puertas Abiertas para las visitas de familiares tiene como objetivo prioritario favorecer la humanización de la atención y cuidados de la UCI, en línea con el Plan de Humanización de la Consejería de Sanidad y las recomendaciones de la Sociedad Europea de Medicina Intensiva.
En los últimos años profesionales del ámbito de la Medicina Intensiva han manifestado la necesidad de reducir o eliminar las restricciones que tienen las visitas familiares aunque, lógicamente, adaptándose a los deseos del paciente y sus condiciones clínicas. Esta flexibilidad también favorece, según los expertos, que los pacientes sientan en mayor medida el afecto y el cuidado de sus familias, lo que redunda de forma directa en su estado anímico.