Nunca fallo a una cita, aunque, a veces, puedo llegar un poco tarde. Faltaban todavía unos días para que diese comienzo la temporada cuando tenía claro en la Redacción que había que escribir algo sobre el inicio del Leganés Fútbol Sala Femenino de Leganés. De hecho, hasta le pregunté a una jugadora del primer equipo qué día exactamente tendría lugar el primer compromiso.
Sin embargo, me alegro de haber llegado ahora. Ahora que han transcurrido cuatro partidos. Ahora que este equipo ha logrado un punto de 12 posibles. Ahora que este grupo, precisamente, el sábado 14 jugará (y ganará) con el conjunto que vi por vez primera enfrentarse al Lega en La Fortuna, el Cidade de As Burgas. Fue a finales de abril y fue un partidazo. Un encuentro que demostró quiénes eran de Primera y quiénes lo siguen siendo. Un 7-5 fue el marcador definitivo. El encuentro estuvo repleto de emoción, pasión y tensión en la cancha y en la grada. Llegó el resultado a ajustarse a un 5-4, pero un Lega serio no concedió ventajas al rival. Como a buen seguro hará en esta nueva oportunidad. Este día 14.
Esa fuerza, marca de identidad de las pepineras, no cambiará. Son los valores que transmiten en el campo los que llevaron al equipo a un glorioso final en junio pasado. Valores que van desde la gran Capitana hasta todas y cada una de las jugadoras. Los principios, por supuesto, hay que tenerlos en cuenta. Pero, son los finales los que marcan las historias. Y mientras haya curvas hay que seguir bailando. Que las turbulencias de un inicio no despisten lo que pueden ser capítulos próximos estupendos. Si fuese por eso, cuántas cosas nos perderíamos. En este momento, seguramente, cuando llevamos cuatro partidos y un empate, sea la oportunidad de estar más tranquilos que nunca de cara a lo que viene. La tranquilidad viene del trabajo, de no especular con el esfuerzo, de insistir. De ser el agua que se atreve a desgastar, por su perseverancia, a la roca, en un principio, toda poderosa. Os digo una cosa, si las habéis visto un minuto vibrar en la pista, basta para darse cuenta de la garra de estas ganadoras.
Esa tranquilidad es necesaria para afrontar momentos importantes. No significa ser confiadas. Significa que no existe ansiedad ante los resultados. Significa seguir siendo fieles a la idea de este equipo. Porque las ideas son extraordinariamente difíciles de derrotar. Y a un equipo tan fuerte y grande no le asustan los inicios complicados. Le motivan para seguir adelante y para reivindicarse.
El rival, con la misma puntuación que las locales, vendrá también con todo. Perfecto. Es, sin duda, el mejor escenario para la primera batalla que haga caer la victoria del lado leganense. Puro fútbol sala femenino.
Pues eso, termino como empezaba. Que, a veces, se llega un poco tarde, pero se llega. Que las recompensas al trabajo también llegan. Que bailar en el aire es imprescindible para cualquier ganador. Y que los inicios no son nada cuando hay finales como el de la 2016-2017. Porque son capaces de darle la vuelta. Porque la fiesta puede que empiece este sábado. Porque el Lega tampoco falla a su cita. Y porque van a ganar. Seguro.