La antropología es una ciencia humana y social que proporciona numerosos conocimientos sobre las costumbres y las conductas humanas en las distintas sociedades existentes y también ofrece interpretaciones y análisis acerca de las que forman parte del pasado.
La enculturación o endoculturación es una experiencia de aprendizaje que se fundamenta en las pautas sociales y culturales que la generación de más edad trata de inculcar a los niños y a los jóvenes. Lo que se traduce en querer imponer los modos de pensar y comportarse tradicionales. Esto también se nota en la adquisición del lenguaje ya que existen cambios de lenguaje graduales en relación con los saltos generacionales, que también influyen en las costumbres y los cambios de conducta.
En realidad, la enculturación supone una decodificación de las pautas de la cultura recibidas por parte, por ejemplo, de los adolescentes. De este modo, se produce una cierta estabilidad cultural aunque también se perciba el cambio social y cultural de las propias sociedades.
En cambio, en la aculturación un grupo de personas o un individuo adquieren una nueva cultura o determinados aspectos de ella. La colonización es un ejemplo claro de aculturación. Tras un contacto cultural con culturas nativas se puede percibir la incorporación o integración de ciertos elementos culturales de la cultura dominante en la dominada. Los indios norteamericanos se fueron aculturando progresivamente, ya que fueron siendo dominados y cambiaron su forma de vestir e incorporaron otros cambios en su vida.
En la antropología cultural se introdujo un concepto denominado difusión transcultural que fue introducido por Leo Frobenius a finales del siglo XIX. Es la transmisión o difusión del uso de objetos, ideas, tecnologías, lenguas y otras formas culturales.
Son mencionables muchos ejemplos de difusión transcultural. La práctica de la agricultura se difundió desde el Medio Oriente hasta Eurasia. La utilización del carro de guerra o el trabajo del hierro también fueron prácticas o técnicas que se extendieron por diversas zonas del mundo a lo largo del tiempo. El traje occidental de negocios se ha expandido también por todo el planeta durante el siglo XX.
En relación con otro concepto fundamental de la antropología y sociología como es la socialización cabe decir que es el proceso de aprendizaje de los elementos socioculturales de un ambiente social y vital y quedan integrados en la personalidad, pero siempre teniendo presente que la libertad personal moldea las decisiones y las conductas.
En la socialización primaria los niños adquieren las capacidades sociales e intelectuales básicas que les serán indispensables en etapas posteriores de la vida y esto se produce en el ámbito familiar. En cambio, la socialización secundaria es la que los niños y jóvenes adquieren en las instituciones educativas y otras más específicas en las que aprenden y se forman de una manera más amplia.
La antropología desde hace unos decenios se ha especializado más y se ha convertido en una carrera propia en la Universidad, porque ha aumentado la demanda de sus estudios. Forma parte de la filosofía, pero se ha fortalecido al ampliar su campo de estudio y de intereses, especialmente, si se considera que desde una perspectiva interdisciplinaria ofrece un gran caudal de conocimientos y de posibles estudios de campo. Además, las investigaciones de los antropólogos pueden ser muy diversas y prácticamente inagotables en lo referente a la materia investigable.
También es preciso reconocer que la antropología filosófica forma parte de los estudios de Filosofía siendo una materia central y que conecta numerosos temas de tipo metafísico y ético. Se encarga del estudio filosófico del hombre o de la mujer. También investiga y reflexiona sobre el origen o naturaleza humana con el propósito de poder determinar la finalidad de la existencia, de modo general.
La antropología en la filosofía de Platón y Aristóteles se ocupaba del alma. Para el Estagirita el alma existía como principio vital. En cambio, para Platón el alma es superior al cuerpo. En la Edad Media todo giraba alrededor de Dios y, por tanto, fue una época teocéntrica.
En el Renacimiento hubo una serie de cambios culturales y antropológicos y se llegó a un claro antropocentrismo: todo gira alrededor del ser humano. En la Edad Moderna el filósofo francés Descartes escribe y piensa acerca de la cosa pensante y la extensa: el alma y el cuerpo. Y la gran pregunta de Kant ¿Qué es el hombre? abarca innumerables aspectos e inaugura una nueva etapa de la antropología.