Licenciada en Bellas Artes, la artista establece un diálogo con la tradición pictórica y el arte más actual.
♦ La Sala José Saramago de Leganés acoge esta tarde (19:30 horas) la inauguración de la exposición ‘Flujos de contracorriente’ de María Jesús Hernández. En ella la artista establece un diálogo con la tradición pictórica y el arte más actual, una forma de síntesis entre la tradición clásica y el expresionismo abstracto, también vigente en este siglo XXI.
De su formación como restauradora le queda el amor por el oficio bien hecho. Un oficio en el que combina la precisión del dorado y el plateado, lento, y elaborado, y la voluntad firme de la acción creativa y el azar en forma de vertidos y transparencias. Manchas que atrapan al espectador sensible de inmediato, dejando ver la intensa profundidad del espíritu de la obra. De los abismos románticos, de la herencia del informalismo, Pollock, DeKooning, Kline y Rothko, todo mezclado con la imaginería barroca de las múltiples iglesias que visten su Zamora natal.
La técnica que habitualmente emplea Mª Jesús se conoce como estofado, una técnica antiquísima que consiste en cubrir una superficie, previamente preparada según la técnica tradicional (cola de conejo y gesso), con hojas muy delgadas de oro, plata y/o aluminio y pintar directamente sobre el metal. La superficie metalizada permite una gran transparencia de las capas de pintura, y produce efectos muy logrados de sombras, texturas o profundidad.
María Jesús Hernández es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Granada y ha participado desde mediados de los noventa en numerosas exposiciones colectivas e individuales, ferias de arte y encuentros. Ha ilustrado publicaciones, y su obra se encuentra en colecciones como AENA y Universidad Rey Juan Carlos, entre otras.
La exposición permanecerá abierta al público en el Centro José Saramago (Avenida del Meditarráneo, 24 – Leganés) hasta el 11 de octubre.
