CSIF Ayuntamiento de Getafe.— Es asombroso ver como, en esta fechas de manipulaciones y noticias sesgadas, se priorizan titulares, en prensa y redes sociales, que sonrojarían a cualquiera con un mínimo de ética o moral.
Lamentablemente no hay sanción para quien recurre a este tipo de argucias. Parece como si nos tomaran por ineptos borregos aquellos que ostentan, ostentaron o desean ostentar puestos de responsabilidad en la administración. Esos ‘Santos’, unos por inacción manifiesta y otros por acciones malintencionadas, que convierten lo público en una partida de ajedrez a lo más puro Juego de Tronos donde siempre pierden los menos poderosos, el ciudadano y el trabajador. Individuos que impulsan y difunden noticias sin contrastar, lo que pone de manifiesto su voracidad política.
No les hacemos esperar más, hablamos de la noticia aparecida en medios que titula “Denuncian el cierre de los vestuarios del polideportivo Juan de la Cierva en plena jornada de sábado” y adjunta una imagen de un cartel informativo “Hoy no se abrirán los vestuarios de los Campos” situado en el vallado de los mismos. Es increíble la difusión que se ha dado a la misma siendo de tan poca relevancia, dado que esta situación de cierre se viene dando desde hace ya muchos meses propiciada por la falta de personal, de hecho durante todo este tiempo no hemos visto ningún titular al respecto del tipo “Debido a la falta de personal en el Polideportivo, los vestuarios…”.
Tampoco se habla de que, los Cuidadores de Instalaciones Deportivas que cubren el servicio en esta instalación, absorben funciones de conserjería, limpieza, atención e información al ciudadano, etc… en un recinto de más de 12 hectáreas y con un considerable número de usuarios. Un colectivo minusvalorado y agraviado, encerrado en un territorio chavista independiente al Cortijo, mal llamado, Excelentísimo Ayuntamiento de Getafe.
Tampoco se habla de que algo que tendría que ser excepción se ha convertido en norma, dejando en más de una ocasión a un solo trabajador para cubrir el servicio, bajas por maternidad o enfermedad que no se cubren… situaciones que se parchean, en esta y otras instalaciones municipales, con incontables horas extras en lugar de fomentar el empleo público.
Tampoco se menciona nada de como los diversos informes del servicio de prevención, caen en saco roto, se almacenen en un cajón que no da más de sí o, con suerte, se toman medidas pasado años y bajo la presión de quien sufre las consecuencias; lo mismo ocurre con aquello que dictamina y aconseja la Inspección de Trabajo.
Tampoco leemos en medios nada que haga referencia a la alta temporalidad en este Ayuntamiento, tema que parece se están empezando a tomar en serio en el resto de administraciones, estatal y autonómica, trabajadores sin derecho a traslado, excedencia… con, en algunos casos, más de 15 años de experiencia.
Podríamos continuar durante muchos párrafos, explicando o preguntando porque, como menciona la noticia, hay más de 20 partidos concatenados y, mientras tanto el Polideportivo del Sector III cerrado antes de las 19 horas, preguntarnos como es posible que la única instalación deportiva de gestión 100% municipal sea la de Juan de la Cierva tras 4 años de gestión “Obrera”, preguntarnos por lo dilatado de los horarios de entrenamiento, en detrimento de la conciliación, sin vislumbrar remotamente la construcción o apertura de nuevos centros deportivos, explicar como se viene prestando el mismo servicio con menos instalaciones y medios humanos habiéndose incrementado considerablemente la población en Getafe (Buenavista, Los Molinos,…); pero no queremos agotar su paciencia.
Una gestión desastrosa, la falta de criterios y los agravios comparativos son señal de identidad de este ayuntamiento, y ojo, no solo hablamos de los últimos 4 años, sino de una enfermedad congénita que viene de hace mucho. La inexistencia de una política de personal conduce al grueso de la plantilla a la desazón, la desidia y en los peores casos a la enfermedad, tanto física como psicológica; no se toman medidas correctoras ni disciplinarias, el dedismo caciquil, no mayoritariamente extendido pero sí existente y palpable, permite que cargos políticos o afines ocupen puestos de responsabilidad y, claro está, utilicen los mismos sistemas organizativos y de gestión, llámense “favoritismos”, “simpatías”, los “me debes”, los “mutismos”, las “amenazas”; lo que conduce a un ambiente de supervivencia, bañado por el miedo, abono para golfos y sin vergüenzas.
Ante tanto varapalo os sorprenderéis de que nos quedemos con lo bueno, con que hay grandes profesionales que aún no han huido, con gran vocación de servicio público, que pese a la falta de medios consiguen que todo continúe rodando; estas noticias no hacen más que dejar retratados a los perversos, a aquellos inútiles que se respaldan en “¿quién ha puesto este cartel?” en lugar de explicar los motivos y los porqués, el retrato de más de un cargo, ex cargo y medio de comunicación, pero os invitamos a que os forméis vuestra propia opinión y os asesoréis convenientemente en redes y prensa, incluso el propio colectivo os recibirá con gusto, ya que la verdad solo tiene un camino.