♦ REMITIDO POR ULEG
Ante la imposibilidad de poder contestar con la misma munición que el gobierno del PP que cuenta a su disposición con recursos económicos, institucionales, patrimoniales y de todo tipo para comprar voluntades mediáticas e informativas o, simplemente, imponer por avasallamiento sus particulares tesis sobre Legatec y lo que representa, desde ULEG queremos manifestar que la verdad nunca necesita cómplices, al contrario que la mentira, la intoxicación o la media verdad (dobles mentiras), que no pueden sobrevivir sin generosos publirreportajes, entrevistas a conseguidores fracasados, el manoseo de lobbys solo pendientes de lo suyo o escritos de otrora grandes «capos» del ladrillo y hoy mamporreros del interés que se tercie.
Comenzamos:
4º) Todo lo relacionado con Legatec está rodeado de polémica, irregularidades y sospechas. Ya el Plan de Sectorización se aprobó de una manera extraña con un pacto contra natura entre PP e IU donde el telón de fondo real no era precisamente la creación de empleo. Lo contamos ya en otro artículo en este blog. Luego las turbiedades continuaron con el Plan Parcial, donde arquitecto municipal, interventora municipal y el titular de la oficina de apoyo a la Junta de Gobierno pusieron negro sobre blanco las múltiples irregularidades que lo jalonaba. El oponerse a la «marea» ladrillera provocó el cese tanto de la interventora como del titular de la oficina de apoyo, quien casualmente fue retirado de la función pública por una paliza propinada por alguien que aún anda suelto justo al salir del trabajo en Plaza Mayor.
Sobre varias de estas irregularidades se redactó por ULEG un escrito de alegaciones, el único partido en presentarlas, que a día de hoy siguen sin ser contestadas. También ayer mismo, la asociación Ciudadanos por el Cambio hizo una interesante aportación y reflexión sobre Legatec.
Pero hay más, va a cumplirse un año desde que se aprobó una comisión de investigación que tenía como razón de ser aclarar cómo, por qué y en qué condiciones a Coca Cola se le dieron terrenos y licencias especiales en Legatec. No se ha convocado ninguna sesión. ¿Hay miedo a que se sepa la verdad?
Tampoco se está explicando que esa millonaria inversión que se anuncia para Legatec proviene de las propias plusvalías generadas por el desarrollo de Legatec, donde además el ayuntamiento es el principal propietario de suelo. El dinero no cae de los árboles, sino del patrimonio de los vecinos, que además verían cómo se destinan esos millones para una rotonda y una carretera a medida de la multinacional de turno y no, para, por ejemplo, esos polígonos industriales totalmente abandonados donde también hay empresas y trabajadores de los que hemos hablado antes.
5º) La maquinaria de presiones, chantajes de todo tipo y veladas amenazas no hacen sino confirmar el indigesto cocido. Las cartas remitidas por Augusto Fuentes, presidente de UNELE, del conocido promotor Francisco Montero y del «abogado urbanista» Francisco Alcaína son un dechado, sobre todo la del último señor, de una visión decimonónica y caciquil de la política y de las relaciones entre empresa y una cámara de representación democrática. El sr. Alcaína queda en evidencia con esa carta y no hace más que desnudar su falta de argumentos y nerviosismo. Habrá que recordarle que todas las sentencias son favorables al Ayuntamiento en todo lo relacionado con el «tempo» del desarrollo de Legatec y convendría, por el bien de sus clientes, que supiera diferenciar entre Planes urbanísticos y Licencias Urbanísticas, porque es impropio además de todo un «abogado urbanista» decir que hay una reiterada votación en contra de un Plan Parcial que será precisamente este 29 de enero cuando por primera vez se someta a la voluntad del Pleno.
8º) ULEG tiene palabra y cumple sus compromisos. Somos un partido revolucionario y radical en la política por hacer algo de lo más tradicional y normal: cumplir su palabra y sus compromisos. Adquirimos con los trabajadores, con los «espartanos» de Coca Cola un acuerdo. Ser personas y partidos honorables se acredita con los actos, no con verborrea, ni rasgamiento de vestiduras. No necesitamos ir a los juzgados para defender el honor, lo defiende nuestro trabajo y trayectoria día a día. Y aunque no es el principal argumento por lo que no podemos apoyar en estos momentos el plan parcial de Legatec, es uno que cuenta con un especial valor simbólico. Las traiciones las dejamos para otros partidos. La sombra de un Tamayazo planea para el pleno de este jueves. Ya hablamos de nuestra teoría del convento. Algún concejal del PSOE puede volverse pachucho, tener problemas con el vehículo que le impiden llegar a tiempo o cualquier otra cosa que se les imagine. El escandalazo estará servido.
9º) Elecciones. Hay un motivo que se quiere soslayar, quitar importancia o directamente vituperar, pero es de máxima virtualidad porque responde al sentido común y a un mínimo de responsabilidad cívica y política. No es prudente que a poco más de 3 meses para las elecciones y la conformación de una nueva corporación municipal se adopte una decisión de tan alto calado y que podría hipotecar y condicionar sin posibilidad de marcha atrás todo un proyecto de ciudad. Si se despejan todas las sospechas que rodean a Legatec, si se aclaran las verdaderas intenciones de determinadas empresas, si los intermediarios, conseguidores y demás buscadores de fortuna dejan de enredar, si desde un punto de vista legal todo es intachable, si el Consorcio Leganés Tecnológico abre sus ventanas y ofrece sin tapujos la información requerida desde hace meses, si los compromisos son transparentes y honestos…, Legatec sería un espacio ideal para el desarrollo y generación de riqueza para Leganés. Y ahí siempre contarán con el apoyo firme y decidido de ULEG. Pero ojo, un desarrollo y riqueza para Leganés y sus vecinos, no para los cuatro «listos» de siempre.
10º) Y aún quedan cosas (y documentos) en el tintero que me guardo para otro artículo, otra intervención o una cita judicial. Quieren amordazarnos, silenciarnos y condicionar nuestra voluntad política. Les vale todo y utilizan a todos. No lo conseguirán, no torcerán nuestro brazo. Cuanto más insistan, cuanto más presionen, cuanto más amenacen y nos perturben (ayer en la comisión del pleno hice constancia a esta situación), más rocosa será nuestra defensa de los intereses de los vecinos, porque más convencidos estaremos de que estamos haciendo lo correcto.
Cada día queda menos para el 24 de mayo. El día en el que los vecinos tomemos de verdad las riendas de nuestra ciudad. Que ni unos ni otros tengan la más mínima duda.