♦ La paracaidista Eugenia Carballedo hizo su aterrizaje oficial ante los medios esta mañana. Fue en el Viejo Café de Leganés. No tuvo nada de especial. No se salió del típico protocolo de rueda de prensa típica y poco innovadora. Tampoco era lógico pensar lo contrario, pues no conoce la ciudad. El discurso que hizo podría ser aplicado a cualquier otro municipio donde la hubiesen destinado. Preocupación por los vecinos, la limpieza de la ciudad y poco más. Ni un poquito de emoción en los ojos al hablar de Leganés.
Carballedo no había pisado Leganés hasta hace unos días, cuando a dedo fue designada candidata del Partido Popular. Hoy mismo pedía a los periodistas cuando le preguntaban por Solagua, Polvoranca u otros proyectos más tiempo. Sí sí, más tiempo. Parece surrealista, pero así es.
Necesita tiempo para estudiarse la ciudad. ¿Puede así aspirar alguien a ser número uno de una lista? ¿Es serio?
Dijo que quiere crear empleo de calidad en Leganés. Por tanto, de ello deducimos que Eugenia Carballedo se declara en rebeldía ante los patrones ideológicos del PP y no, supuestamente, destruirá ni precarizará empleo. Un gobierno que consiente que Coca Cola se salte lo que diga la justicia o que consienta contratos de cuatro horas a la semana por 50 euros, destruye y precariza empleo. Carballedo, a priori, no seguirá directrices de partido en esta materia.
Tampoco contrataría jamás a un ex-colaborador de ETA como Gonzalo Boye, cosa que sí hizo Jesús Gómez. A esta pregunta que le realicé fue tajante. En cuanto a las listas, aclaró que no le preocupa. A los aún concejales palmeros de Gómez que salen de las frascas, sí. Se hacen más fotos que nunca, y en redes sociales no paran de hacer a la candidata el caldo gordo. Me dicen que más de uno se llevará una buena decepción el día 20.
Y ante este panorama, el Presidente de NNGG de Fuenlabrada dice que aburrimos. Tiene que aprender que en el siglo XXI se puede y se debe informar y contar las cosas. En un día como el 14 de abril, más que nunca rechazamos la Ley Mordaza. Brindemos por la libertad de información y opinión. Salud y República.
