► Martín de la Sierra, el polémico edil de cultura, ha sido reprobado en el Pleno del Ayuntamiento de Leganés y también fue citado por el juez en el caso de las facturas de La Cubierta
► Martín de la Sierra fue citado por el juez por las facturas de La Cubierta
Sin duda uno de los concejales socialistas más controvertidos de esta legislatura. Tanto es así que Martín de la Sierra fue reprobado en sede plenaria. Su gestión está originando debate en la sociedad leganense. Pero, no por sus luces, sino por sus sombras. De hecho, gran parte de sus intervenciones en Pleno son para referirse a ULEG y a su portavoz, dejando patente una animadversión por quien le planta cara y le hace oposición.
No hace falta bucear mucho en su concejalía para ver cómo están las cosas. Llevamos dos años y, ¿qué se ha hecho en lo referente a materias tan importantes como Cultura y Festejos? Basta con darse una vuelta. Basta con ver el auténtico fracaso en cuanto al aforo se refiere de la famosa Ópera Carmen. Basta con mirar la situación de la Escuela de Música. Basta con saber que Reinaldo López, afiliado socialista, es el colocado de director de dicha escuela.
En esta oportunidad, traemos un nítido ejemplo del nulo interés que muestra este concejal en asuntos de su competencia. Proyecto Crepaso, cuyos integrantes, en una gran parte, son de Leganés, ha realizado en el municipio distintas acciones solidarias que siempre han redundado en los leganenses. Más allá de que este tipo de iniciativas tengan que correr a cargo de vecinos y no esperarlas del consistorio, no está reñido el hacerles partícipes. Nunca este concejal tuvo el mínimo detalle de referirse a las acciones de este grupo.
En ese sentido, uno de los trabajos de esta compañía, un cortometraje, se le hizo llegar a este concejal con el único fin de darlo a conocer. Año y medio después, siguen esperando respuesta. A nadie se le escapa que siempre queda muy bien cualquier respuesta tipo que felicite y anime a continuar a los vecinos y vecinas en sus proyectos y, si son solidarios como el de Proyecto Crepaso más aún. La ausencia de respuesta da todo el derecho a pensar en pasotismo y desidia de este concejal para con las acciones de sus ciudadanos. De ahí, el titular. Ningunear quiere decir no hacer caso, no tomar en consideración… Es evidente que está en su derecho de no contestar, pero, quizás, no es la opción más lógica.
Proyecto Crepaso ha realizado varias obras teatrales en el municipio cuyos beneficios íntegros se han destinado a la Asociación de Esclerosis Múltiple de Leganés, al Comedor de Paquita Gallego, a la Asociación de Fibrosis Quística, a la Asociación de Asperger… Pero, lamentablemente ha dado por finalizado su trabajo en Leganés, como consecuencia de las múltiples trabas de este Gobierno, y marchará a otros municipios. Seguramente, este humilde grupo ha hecho mucho más en materia solidaria que el concejal del área.
Sin ir más lejos, el pasado mes de octubre, Proyecto Crepaso tenía fijada fecha para una obra 100% solidaria cuya recaudación iba a ir destinada a la Asociación Canina de Leganés, entre otras. Tenían todo preparado y comprado (todos los gastos corren a cargo de los integrantes del grupo). Pues, tan sólo unos días antes, se les canceló la obra. Proyecto Crepaso se puso en contacto con la concejalía de Cultura para intentar evitarlo y no dieron más explicación que no había para pagar a un técnico de iluminación y sonido. El concejal de Hacienda también hizo declaraciones en esa línea. Un gobierno con directores irregulares, que se gasta miles de euros en banquetes, ¿tiene que cancelar estos actos ciudadanos? A este periódico le han comunicado que se echaron para atrás otras galas benéficas de asociaciones locales. Proyecto Crepaso hizo todo lo posible para revocar la situación y no cancelar la función de octubre, pero sus esfuerzos fueron en vano. Por ahí, han tomado la irrevocable decisión de dejar de insistir en Leganés.
A las acciones y trabajos de este proyecto, institucionalmente hablando, sólo se registró apoyo in person y por redes de un único partido de Leganés, ULEG.
Posiblemente, para hacer grande la Cultura, lo primero que haya que hacer es no ningunearla