Exclusividad y valor añadido singular para ‘Vinos de Madrid’
La Comunidad ha recuperado la variedad madrileña de la uva moscatel de grano menudo, en claro peligro de extinción, para ofrecer a los viticultores y a la Denominación de Origen Vinos de Madrid la oportunidad de mejorar los caldos que llevan al mercado, la producción de las vides y la renta de los viticultores de la región. Este hallazgo ha sido fruto de los ensayos del Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario.
Actualmente se trabaja en la búsqueda de una mejor elaboración de los moscateles y de los clones para conseguir los mejores maridajes dependiendo del tipo de plato con que acompañen. La recuperación de esta variedad y la selección que se busca puede proporcionar a los vinos madrileños una exclusividad que les dé un valor añadido singular que permita mejorar su calidad en el mercado, lo que conllevaría un incremento de la demanda y las ventas, repercutiendo en la creación de empleo.
Enrique Ruiz Escudero, viceconsejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, ha asistido a una cata de estos vinos producidos a partir de las diferentes cepas madrileñas, algunas centenarias, maridado con productos típicos navideños como el salmón ahumado, foie, queso y chocolate, acordes a las características de cada uno de ello. Concretamente se han catado 4 clones seleccionados equilibrados para blancos jóvenes muy aromáticos y frutales, tres de ellos procedentes de San Martín de Valdeiglesias y uno de Colmenar de Oreja.
Hasta el momento se han investigado los vinos producidos por los 22 clones obtenidos por el IMIDRA y las diferencias de cada clon en su cultivo, rendimiento, resistencia a enfermedades y a las heladas así como las características aromáticas, que se facilitarán a bodegueros y viticultores para mejorar sus vinos. La uva moscatel de grano menudo, blanca, está incluida en las que se utilizan en la D.O. Vinos de Madrid desde 2002, si bien la variedad madrileña apenas se utilizaba, y las pocas plantaciones que existían se situaban en otras zonas como Navarra, Francia o Italia.
Sin embargo, se trata de una uva conocida en Madrid desde al menos el siglo XVI. Los técnicos regionales, junto con los de la D.O Vinos de Madrid, han recuperado esta variedad en 10 parcelas de agricultores de la Comunidad en las que se cultiva esta uva desde hace más de 30 años. Produce unos vinos de reconocida calidad, con un alto aroma y elevado grado alcohólico, por lo que es un componente excelente para aromatizar variedades neutras como Airén y para la elaboración de vinos semidulces.
Al iniciar la investigación ‘Selección clonal de la variedad de vid moscatel de grano menudo en la Comunidad de Madrid’, el IMIDRA, tenía el encargo desde la D.O madrileña de buscar uvas moscatel de grano menudo madrileñas que salvaran los principales inconvenientes que suele tener esta variedad: poca productividad, sensibilidad al oídio (un tipo de hongo) y un brote adelantado que la hace más vulnerable a las heladas. Este instituto regional lidera la transferencia tecnológica de conocimientos con el objetivo de mejorar la competitividad del sector agroalimentario de la región.
En la actualidad el IMIDRA lleva a cabo cinco proyectos de investigación sobre viticultura y enología. Con estos estudios se impulsa la mejora de la calidad, la producción y la diversidad de los Vinos de Madrid, cuya D.O se ha situado en un lugar destacado tanto en el mercado nacional como en el internacional. El aumento de la calidad y la intensa labor de promoción desarrollada por el sector junto con la Comunidad ha permitido que en 2013 las exportaciones rompieran la barrera del millón de botellas madrileñas, lo que supuso un incremento próximo al 43%.
