Calle Ramón y Cajal, de Getafe, una de las principales calles del centro de la ciudad. Foto: archivo.
► El municipio ya ha rebasado el valor máximo diario en más de una ocasión en este 2020
Getafe se envuelve de gris. El aire que respiran los vecinos y vecinas del municipio contiene una notable presencia de partículas contaminantes, que, a la sazón, suponen un claro riesgo para la salud pública. Así, según dicta la Red de Calidad del Aire de la Comunidad de Madrid, no se pueden superar los 50 microgramos por metro cúbico de partículas en suspensión (PM10). No en vano, Getafe en estos primeros días de enero, ha llegado casi a doblar lo permitido. Se ha llegado a registrar hasta 92 microgramos por metro cúbicos de dichas partículas. En otros días, los valores han alcanzado guarismos por encima de 80.
¿Pero por qué hemos alcanzado estos niveles tan preocupantes? “Se junta la ausencia de medidas a que es la peor época del año, con una inversión térmica día y noche que nos deja la ‘boina’ en cuanto no hace aire”, manifiesta, para Crónica, Sergio Rubio de Getafenbici, colectivo ciclista y pro medioambiente de la ciudad.
En cualquier caso, a priori, esta situación ya supone toda una invitación a quedarse en casa a quienes se encuentren aquejados de dolencias respiratorias o cardiacas. ¿Pero va más allá y estamos ante un problema de salud pública? Para Rubio, “es un problema de salud generalizado. Se puede comprobar estos días con el porcentaje de aumento de afección de vías respiratorias en urgencias y centros de salud. Las personas con enfermedades respiratorias ven afectado fuertemente su día a día, incluso, efectivamente, les imposibilita la salida de sus viviendas. El resto notamos congestión, alergias… Aunque no hay que olvidar que estas situaciones también generan cánceres”.
Es evidente que ante realidades como ésta, las administraciones juegan un papel determinante, y en este negociado los entes públicos locales tienen cierto margen de maniobra. ¿Está el Consistorio, regido por la socialista Sara Hernández, tomando medidas? Desde en Getafenbici son tajantes a la hora de contestar con un sonoro “no”. “Se amparan demasiado en las pocas competencias para actuar antes los graves problemas supramunicipales que tenemos”, sostienen; a la par que agregan que “las medidas realmente efectivas están ya inventadas. Nos referimos a potenciar el transporte público, priorizar el peatón, y desincentivar y quitar privilegios al coche privado. Ahora estudiarán la posibilidad de ampliar el aparcamiento del hospital, a lo que nos oponemos frontalmente. Primero porque probablemente sería a costa de zonas verdes; y segundo porque generaría más coches y más coches creyendo que podrán aparcar mejor. Consideramos que un bus pequeño constantemente entre Getafe Central y el interior del hospital puede ser una buena solución”.
¿Cuánta culpa tiene el diésel?
La generación de partículas, más allá de ciertas causas naturales, responde en gran parte a actuaciones humanas. ¿Hasta qué punto influye el diésel? “Mucho. En los satélites se aprecia la contaminación sobre las autopistas (polos industriales aparte) y en Getafe estamos rodeados de autopistas de gran capacidad, unido a nuestros movimientos. El diésel no es que contamine mucho más que la gasolina pero tiene un porcentaje mayor de gases NOx que son especialmente perjudiciales para la salud”, zanja Sergio Rubio.
