Todo lo que empieza tiene su fin. Es una máxima innegable. Eso está casi sucediendo ya con las Fiestas de Navidad. Pero, éstas en su colofón tienen su guinda más preciada. La noche más mágica del año está a punto de tener lugar. Sus Majestades los Reyes de Oriente han aterrizado ya en Leganés y después de la Cabalgata se pondrán, junto con sus ayudantes, a trabajar.
Miles de niños, y sin lugar a dudas no tan niños, aguardan con ilusión el resultado de lo que esta noche deparará. Mañana lo podremos comprobar. No en vano, aún hay tiempo de pedir alguna última cosa, algún último deseo, pues Melchor, Gaspar y Baltasar siempre están atentos y, sobre todo, vigilantes…
Ellos tres, sus pajes y camellos recorrerán y entrarán en las casas de nuestra ciudad, pero también sería interesante alguna petición común.
Leganés cuenta con un amplio tejido asociativo muy activo. Ellos ayudan en todo lo que pueden a los demás, por ello cualquier ayuda hacia los que ayudan siempre es buena. Es algo que escribimos en esta carta. Nos referimos, por ejemplo, al Comedor Social Paquita Gallego donde se reparten más de 100 comidas calientes al día. Ojalá les vaya mejor a quienes llaman a diario a su puerta.
En ese sentido, tenemos un alcalde que se ha permitido el lujo de ir de comilona a costa de todos y cada uno de los vecinos de Leganés. Muy mal. Viejas prácticas alejadas del ansiado cambio de cara de la política. Para él, carbón. Pero, no del que se come; si no, no tendría gracia.
Leganés necesita una ciudad más limpia. Este es un tema donde falta mucho aún por recorrer. Basta darse una vuelta para comprobar la suciedad de las calles y su pobre mantenimiento. Las bolsas de basura se acumulan alrededor de los buzones de residuos, por ejemplo.
Desde luego, darse una vuelta es una de las maneras que más te acercan a la realidad de un municipio. Recorrerlo, pisarlo y hablar con sus gentes. En ese sentido también veríamos una realidad muy cruda; la del desempleo. La cifra siempre que supere el cero será alta. Pero, 17.000 parados en el haber de Leganés es toda una preocupación. Un empleo en condiciones, sin duda, es uno de los mejores regalos que se podrían encontrar en la mañana del día seis.
Lo que no ayuda al desempleo son los enchufes que se dedica a hacer Santiago Llorente. Sin ningún pudor y vergüenza ha colocado a su gente. Para muestra un botón, el jefe de la Asesoría Jurídica de Leganés es militante socialista y colaboró en época electoral. El señor Borreguero cobra 84,000 euros anuales. A él, no sólo lo ha visitado el Rey Llorente, sino el Gordo de la Lotería, Llorente en versión Papá Noel y hasta el Año Nuevo. Colocar a su gente ha sido una de sus ocupaciones y preocupaciones. Esto está mal. Se merece carbón. Pero, recordemos: del que no se come, si no, qué gracia tendría.
Poco más pueden pedir los allegados socialistas de Leganés, al menos en cuestiones profesionales. Ya lo afirmaba también la oposición que la preocupación de este alcalde había sido el de colocar a su círculo.
Al PP de Leganés ya le echaron un merecido carbón en mayo así que poco más. Aunque están felices con los disparatados sueldos que cobran de los que ya dimos buena cuenta en el último reportaje político de la ciudad. Es cierto, los sueldos son iguales para todos los concejales.
Otro de los socios de gobierno del señor alcalde es Rubén Bejarano. A él le echaron carbón los votantes (con justicia por la nefasta actuación de IU en Leganés la pasada legislatura) y Llorente le echa un oferta nada despreciable: tan sólo un concejal y grupo propio, entrar en gobierno, cartera, directores generales…
En general los políticos andan bien servidos. Hoy la ilusión está en la gente. Antes escribí que los Reyes recorrerán las casas. Desafortunadamente, hay hogares que no visitarán. Cada vez son más las iniciativas que intentan recoger juguetes para que ningún niño se quede sin uno. Eso es algo muy loable.
Uno de los mayores regalos será ver la sonrisa de la inocencia (bendito bien) de niños y niñas. De ellos es la magia y de todos el disfrute. Feliz noche de Reyes.
