Estamos en la época de la transparencia, pero falta mucho por conseguir aún en ese campo. Podemos decir que de boquilla va funcionando, sin embargo donde se tiene que ver, en el propio terreno de juego, le queda todavía. En los últimos tiempos, hasta el propio alcalde suspende en transparencia. Por citar dos ejemplos, no dice a quién invita con el dinero de todos o celebra plenos a puerta cerrada. Pero, en esta oportunidad, quiero poner de manifiesto que seguimos sin tener públicas, a día de hoy, las declaraciones de bienes de altos cargos. Ahí entran los directores generales. Como es consabido ninguno de ellos es funcionario y sí son militantes, exconcejales o cargos de PSOE o IU. Es decir, personas que tienen el carnet en la boca del partido y se les va acomodando en puestos de responsabilidad (a razón de más de 50.000 eurazos anuales). Es decir, personas que por afiliarse a un partido ya van teniendo su futuro. Es decir, enchufados. Una de ellas es la directora general Marta López (IU). Por supuesto, a día de hoy, tampoco está en la web del Ayuntamiento pública su declaración de bienes. Evidentemente, para no dejar morir los temas, para rescatar las verdades del oscurantismo y para ser contrapoder (que no cuarto poder) estamos los periodistas. Por tanto, es lógico preguntar la razón de la ausencia de estos documentos dentro del portal de transparencia. Para informarme de primera mano, y a través de Twitter, pregunto a Rubén Bejarano (que tiene algo que ver en IU) que cuándo va a presentar su declaración Marta López como alto cargo. Bejarano no responde. Pero, sí lo hace la señora López. De manera totalitaria y absolutista me responde que “no hace falta que le pregunte a nadie por mis obligaciones” a la par que añade que “mi declaración está en Secretaría como las de los cuatro años anteriores”. Bien, parece ser que a la señora López, por las declaraciones que desprende, le gustaría convertir Leganés en un régimen tiránico donde los políticos como ella se arrogan la potestad de decir a un periodista, que hace su trabajo, si hace falta o no que pregunte por las obligaciones de los representantes públicos. La señora López debería de saber que, en democracia, los periodistas deben controlar precisamente eso, el correcto cumplimento de las obligaciones de nuestros políticos. Y eso se hace preguntando, le guste o no a ella. Y es lógico preguntar al hoy máximo responsable de su partido en Leganés. No me gustan los políticos que desprenden la soberbia de decir a la prensa qué ha de hacer.
Por otro lado, su afirmación de que si está en Secretaría es para frase (normalilla) de monólogo cómico. Y es que a veces es mejor reírse. Señora López, como si está en el cajón del segundo piso, en la estantería del tercero, en el armario del sótano o en el frigorífico del grupo municipal. ¿Qué nos importa eso a los ciudadanos? Tiene que estar en dónde tiene que estar y hoy no están: portal de transparencia y que sea pública para todos.
Evidentemente, ante las declaraciones que hace la señora López vía Twitter citándome (y que son propias de otras épocas) le respondo que yo como periodista pregunto a quién estimo oportuno y que no debe coartarlo. Además, le escribo que espero que no le moleste que haga mi trabajo en libertad. Para más inri, ella responde que “no le coarto, le afeo el tono de su pregunta. Si tiene algo que preguntar, hágalo a quién tiene la respuesta, sin paternalismos”. Contestación sumamente kafkiana por su absurdez y preocupante para la libertad. Ya sabemos de qué pie cojean los que afean a los periodistas que son molestos y hacen su trabajo. Vuelve a ordenarme a quién tengo que preguntar y decirme cómo tengo que hacer mi trabajo. Señora López, no le vamos a aceptar el juego. Los periodistas no toleramos que los políticos nos digáis qué o a quién preguntar. Y termina, con otras palabras para su monólogo cómico, diciendo que lo haga sin paternalismos. Esta directora general irregular no se entera que si quiero saber algo de representantes de IU se le puede peguntar, perfectamente, a su máximo responsable como es Rubén Bejarano, que para eso está. ¿Dónde está ahí el paternalismo? No sólo es una directora general irregular, que lo dice la Justicia, sino que también hace el ridículo con estas cosas. Sólo le faltó incluirme, por preguntar a Bejarano, en el grupo del patriarcado. Por favor, seamos serios…
Prosigue un poco la conversación y López expresa que “está claro que usted tiene su opinión y dista mucho de la mía”. Ahí estamos de acuerdo. Mi opinión es que su declaración debería estar en el portal de transparencia y no en un cajón, frigorífico o vaya a saber dónde. Pero, en lugar de eso, se muestra ufana y decida a dar lecciones de periodismo. La nueva política. No me extraña que, por gente como ella, IU sea hoy una fuerza marginal en Leganés y tenga la paupérrima representación de un concejal. Y ahí es responsable directísima la señora López, quien fue concejala los anteriores cuatro años. Tuvo a dos maestros como Alarico y Calle (del que por cierto el perfil de IU Leganés Oficial me citaba por Twitter para decir que “la gente que ahora estamos en IU estuvimos luchando para echarle y lo conseguimos. Era de IU en esa época, pero se le ha expulsado. Por eso y muchas más cosas). Se le echaría, pero bien que avaló como número 27 la última lista electoral de 2015. No vale entristecerte la noche electoral cuando has tenido una legislatura para cargarte el partido.
En suma, tengo malas noticias para López: seguiré preguntando en libertad por los asuntos que quiera y a quién quiera. Espero haber sido claro. Aunque eso haga que ni me salude. Hace un año, López me decía, dentro de lo correcto, hola o adiós. Después de mayo del año pasado no. No me importa que no lo haga, el periodista debe seguir en la misma línea. Con estas declaraciones que hace me confirma que los periodistas molestos y necesarios para la democracia no le gustan. Aunque es notorio que a esta representante le falta mayor cintura (la cintura política quiero decir). Pero, seamos serios (otra vez), qué vas a esperar de alguien que bebió de los pechos (políticos) de Calle y Alarico…
Tengo a Rubén Bejarano por una persona honesta y que seguro no comparte el absolutismo y totalitarismo de ordenar la forma de proceder a los periodistas ni decirles que usan paternalismos. Cada vez lo veo más sólo en el barco del Gobierno y del de su propio partido.
Por cierto, el tema sigue ahí. No hay declaraciones de bienes de altos cargos. Seguiremos preguntando aunque el periodismo molesto no guste.