♦ Del partido magenta se desconoce por las tierras pepineras cuáles son sus propuestas concretas para el municipio. Sí, retuitean todo lo que dice Rosa Díez y Toni Cantó, pero de la villa leganense poco han hablado más allá de lugares comunes. Por ejemplo, ni una sola alegación o enmienda han presentado a ordenanzas fiscales, a presupuestos, a planes urbanísticos, a bases de oposiciones…, hasta que con las estaciones de servicios de gasolineras se han topado, donde el interés que muestran por la cuestión raya lo enfermizo, por no decir sospechoso. Sobre este tema han centrado más del 50% de sus comunicados a los medios, ha sido la materia de su única rueda de prensa conocida y es por lo único por lo que han registrado alegaciones respecto a algún proyecto municipal.
UPyD ha basado su discurso en la localidad en que los partidos ahora representados en el Ayuntamiento no se ponen de acuerdo, pero resulta de lo más curioso que cuando se ponen de acuerdo en que Leganes quede libre de gasolineras en el casco urbano, al bueno de su coordinador y aspirante a la alcaldía, Díaz Casado le parece mal. Él, librero de profesión, parece que tiene claro que aunque el papel lo aguanta todo, las hojas de los libros no son suficiente combustible. Necesita la gasolina, en singular comunión con los planteamientos de determinados lobbies empresariales.
Pero estas incoherencias no son ajenas a UPyD, que se lo digan a su “lideresa”, regenerando España desde hace 40 años subida en un coche oficial y a lomos de una Sicav. En Getafe, Alcobendas o en Alcalá de Henares se han hecho famosos los chicos de UPyD por su doble moral como el criticar las comilonas y mariscadas…, de los demás, las luchas internas…, de los demás o incluso perseguir al imputado, siempre que no esté en las propias filas.
Pero ya se sabe, todo eso da igual, lo importante es que suene la música: «quiero más gasolina, dame más gasolina»…, nada nuevo bajo el sol «regenerador».
[OPINIÓN: José Luis Alonso]