► Se trata del decimoquinto poemario del creador local
► La poeta Marisa Vaquero acompañó en el acto
Este jueves 31 de enero, la conocida La Libre de Barrio acogía la presentación del último trabajo del poeta y compositor leganense Santiago Gómez Valverde, ‘Toda la luz es nuestra’, en donde el autor intenta transmitir “sus perfumes y sus pensamientos sobre la vida, el amor, la muerte…” Esta última tan presente en él desde que en febrero del año pasado falleciese su madre, Doña Patro. Se trata del decimoquinto poemario del creador local, que ha sido editado por Espacios Ediciones. La imagen de la portada ha sido realizada por la artista Adriana Veyrat. Gómez estuvo arropado por alrededor de 30 personas que disfrutaron del calor de una declamación única, por parte del autor, que seleccionó un racimo de versos para la ocasión. El mejor abrigo para el frío que regala en estos días la borrasca ‘Gabriel’. Entre las obras más famosas de Gómez está La Palabra y el Tiempo o el himno Siempre seremos el Lega, del que es compositor.
Amigos. Esa era la palabra con la que el bueno de Santiago Gómez llenaba cada bocado de tarde que se degustaba en el epicentro de las letras más rebeldes de Leganés. Gómez, con su exquisita elegancia, se mostró desde un primer momento muy agradecido por la compañía que asistió y remarcó el orgullo que le supone presentar este poemario también en Leganés, lugar que él siempre lleva por bandera. La presentación corrió a cargo de Marisa Vaquero, poeta y amiga del autor. Vaquero ganó el primer Premio Ciudad de Leganés por ‘Jardines de piedra’ en 1988.
La luz tenue que brillaba en el salón dejaba entrever las sentidas miradas de dos amigos, que hicieron de hilo conductor de la tarde. Marisa Vaquero establecía un contraste entre las juventudes de muchos de los allí presentes y la etapa en que se encuentran ahora. No en vano, la conclusión era clara: más allá del paso del tiempo, siempre quedará la poesía para perpetuar, bajo el abrazo amigo entre el brindis de una copa de vino.
Como ya expresó Santiago Gómez en una entrevista a este medio, ‘Toda la luz es nuestra’, que ha recibido críticas extraordinarias, la figura de la buena persona de Doña Patro es clave, como así lo fue y es en la vida de Santiago. A ella va dirigido el epitafio de la contraportada: “qué sencillo es morir, sólo cerrar los ojos o dejarlos abiertos para siempre”. Y los poemas de amor, “a Rocío, mi pareja desde hace ocho años. Tengo claro que si no escribiera, si no viera esa luz, dejaría de respirar”, asume Santiago Gómez.
Los últimos versos que leyó Santiago coincidieron con los primeros brindis. El resto, ya se sabe. Una copa entre los viejos amigos para sellar un nuevo reencuentro. Otro más de todos los que aún quedan por bailar.