Precisamente cuando Madrid se encuentra en uno de los momentos de mayor contaminación, este martes 17 de noviembre, se celebra el Día Mundial del Aire Puroe. La boina que cubre el cielo de la capital del reino es notoria y condiciona sus alrededores. Es un problema muy serio de salud pública. Los niveles de dióxido de nitrógeno son notables y perjudiciales para nuestro organismo.
¿Es un problema excepcional o viene de lejos? Desde la pasada legislatura esta gran boina reinaba en los cielos madrileños. No se tomaron medidas efectivas para su disminución, claro que bastante tenía Botella con otras contaminaciones. Manuela Carmena y su equipo no han dudado en poner en marcha un plan de medidas. Restricción del tráfico, limitar el aparcamiento, multas…
¿Pero son efectivas estas medidas? Es cierto que la disminución de la velocidad conlleva que las emisiones de gases desciendan pero resulta una medida superficial. Son dos las causas del NO2: el gran volumen de tráfico y las elevadas presiones del anticiclón de Madrid, que dificulta la subida del aire, pero de las condiciones meteorológicas no nos podemos ocupar. Aún no son competencia de Carmena sino de la naturaleza.
Es un problema el de la (altísima) contaminación que viene de lejos. Cada año nos encontramos en una situación semejante. Por eso, deberíamos preguntarnos si verdaderamente desde las Administraciones se está haciendo el suficiente hincapié en los beneficios del uso del transporte público. Quizás a este gobierno de Carmena le pegaría más invertir en pedagogía que en multas al contado. Pero, igual ya no hay tiempo. La boina no viene. Está encima y se cuela en nuestras vías respiratorias.
Es un gobierno, el de Ahora Madrid, desbordado por la situación. Han ido anunciando a últimas horas de la noche las restricciones de tráfico. Se presupone que la gente debería saber con más antelación si podrá disponer de coche para ir a trabajar o no.
Un plan de acción un poco descoordinado. Es de lógica implementar las frecuencias de metros, buses…
Y para colmo, según un eurobarómetro, nuestro país es el que tiene menor información en materias de contaminación.
Se ha escrito mucho estos años sobre el tema pero la actuación y voluntad política no han sido suficientes. ¿Se están viendo las orejas al lobo? ¿Es posible un Madrid con un 50% de coches a lo habitual? ¿Cuál es la receta para este problema medioambiental y de salud?
Lo que es seguro que aire puro este año no tendremos
