Rebeca González
► Rebeca González Amoriz (Becky) es cargo de confianza de David Pérez y apoderada de un medio que se lleva 30.000€/año de publicidad institucional de este Consistorio
► División: Un candidato del PP de Alcorcón ha colaborado en vano en la búsqueda del salario municipal de González Amoriz
► Ayuntamiento de Alcorcón: oídos sordos a la transparencia, pero su jefa de Prensa, Paz Larrain, elabora dosieres para desprestigiar a un portavoz de la oposición
Rebeca González Amoriz, también conocida en redes sociales como “Becky la testaferra” es hija de Felipe González Gervaso (apodado El Lechero), constructor investigado por presunta corrupción en los tribunales. González Amoriz desempeña a la vez el cargo de apoderada de la empresa editora de Al Cabo de la Calle y un cargo de confianza en el área de Comunicación del Ayuntamiento alfarero. A lo que se le puede presumir de grosera bicefalia se le suma la sobresaliente inyección de dinero público, 30.000 euros anuales, de Alcorcón al mencionado periódico. Cabe recordar que, tal como publicó este medio, un afiliado del PP expresaba a Nuevo Crónica que “se metió a Rebeca en el Ayuntamiento para que su periódico nos tratase bien”, y agregaba que “nunca me ha gustado bailar el agua a nadie ciegamente. Hay que estar por encima de ciertos comportamientos”.
Así las cosas y con el fin de arrojar más luz en esta historia en forma de datos, Nuevo Crónica ha querido saber cuál es el sueldo público de la testaferrada. En cierto modo, y es lícito preguntárselo, ¿cuál es el precio de que Al Cabo de la Calle “trate bien” al Gobierno (PP) de Alcorcón? Más allá, sin olvidarlo, de la inyección en forma de publicidad institucional.
En un primer intento, esta cuestión no conseguiría ser resuelta mediante la web municipal, esto es, no se veía por ningún lado la información a que nos referimos. Sin embargo, una persona que fue candidata en las listas del PP de Alcorcón en 2015, en contacto con Nuevo Crónica, intenta buscarlo también y manda algunos pantallazos con datos, pero ninguno se ajusta a lo que buscamos. Esta persona se despide por escrito (conversación guardada) lamentando no haber podido ser de más ayuda, no sin antes recomendarnos ponernos en contacto con el gabinete de Prensa y que así lo deberíamos obtener. Por otro lado, esto evidencia una clara división interna en el PP de Alcorcón. No todos sus miembros ven con buenos ojos esta tesitura que consiente su alcalde, David Pérez.
Silencio sobre “Becky”
Y, efectivamente, tiene toda la razón esta persona, el área de Comunicación de una administración pública no debe, sino tiene que facilitar todos y cada uno de los datos públicos que le sean demandados. Ya les avanzo que no será así. Enviamos un correo oficial el 15 de febrero cuyo texto es el siguiente:
“Hola, (nombre trabajadora del gabinete). Según conversación mantenida por teléfono, hoy mismo y en otras ocasiones desde hace varias semanas, paso a plasmar por escrito la petición de prensa para que sea contestada:
-¿Cuál es el salario de la cargo de confianza Rebeca González Amoriz? Se trata de un dato público, y entendemos que será contestado sin ningún problema.
Quedamos a la espera de respuesta.
Sin otro particular, recibid un cordial saludo extensivo al departamento de Comunicación”.
La cosa se pondría taciturna. Hasta tal punto que tuvieron que pasar semanas y realizar más llamadas. Tras esto y a fecha 6 de abril (casi dos meses después para buscar una cifra) el correo de la sección de prensa del Ayuntamiento de Alcorcón contesta: “Buenos días Adrián, respecto a tu petición, como en reiteradas ocasiones anteriores, te remitimos a los datos que aparecen de forma pública en la página web del Ayuntamiento de Alcorcón. Un saludo”.
Es notorio que habría sido mucho más nítido, bien pegar el enlace que nos direccione directamente con lo solicitado, bien plasmar en el propio correo el dato. No tiene mayor dificultad. Volvemos a pasearnos por la web, sin encontrarlo. A mitad de esta semana insistimos y llamamos de nuevo. Nos lo coge una trabajadora del gabinete con la que hemos hablado en otras ocasiones y que siempre nos ha atendido con suma diligencia dentro de su posición.
En la ocasión anterior, ya pregunté claramente si se iba a dar el dato o no y nos expresa que “yo se lo pasé a los responsables y ellos valoran si hay respuesta o no”. Le contesto que yo puedo valorar si esta tarde voy o no al cine, pero que la transparencia no es algo que se pueda valorar; se tiene que dar.
Volviendo a esta semana, comunico a esta persona que sigo buscando, pero que, si no les importa, me envíen la información directamente. “No tengo ni idea de dónde está eso”, responde. “¿Me puedes pasar con ellos, con tus jefes?”, pido yo; a lo que oigo de vuelta, “la respuesta va a ser que lo busques y hagas tu trabajo”. Es obvio que la labor periodística en este asunto por parte de este medio se ha llevado a cabo; sólo nos falta una respuesta. Insistimos, esta trabajadora siempre se ha mostrado profesional y cordial. De hecho, ella también, conforme conversábamos por teléfono, intentó encontrar, de nuevo en vano, la información desde su ordenador. ¿Estamos seguros de que ese dato está colgado? Y si lo estuviere, ¿por qué no lo pasan especificado a un medio que no hubiese logrado dar con él en lugar de contestar vagamente con que se mire en la web?
No hay sueldo, pero sí dosieres
Por último, traemos un dato revelador y que ilustra perfectamente esta historia. Paz Larrain Ecclefield ocupó el puesto 24 en las listas de 2015, encabezadas por David Pérez. Tras las elecciones pasó a ser jefa de Prensa. Larrain, en noviembre de 2016, envió a este periodista, por correo electrónico, un dosier sobre un portavoz de la Oposición.
Evidentemente, con lo que ellos consideran “información negativa” de esta persona. Cualquier periodista mostraría curiosidad profesional, a priori, en recepcionar información, a la par que, con un mero vistazo toda vez enviada, se daría cuenta de las intenciones de ésta. ¿Muy hábiles para elaborar dosieres para desprestigiar a concejales de Corporación y remisos para revelar sueldos públicos? La leche…
