El pasado día 26 de abril, el grupo municipal de Ahora Getafe denunciaba la situación de abandono del «otrora polideportivo de San Isidro, convertido en un basurero público y también en la nueva escombrera municipal»
Ante las denuncias de los vecinos del barrio de San Isidro, AG hn solicitado información al Gobierno municipal sobre distintas cuestiones relacionadas con el incremento de escombros y basura. «¿Desde cuándo se ha habilitado este lugar como vertedero y depósito de escombros? ¿De dónde proviene ese escombro? ¿De obras del municipio o acaso de particulares?», han preguntado.
También han requerido sobre las razones del «derribo de la puerta principal y también de la parte de la pared anexa a dicha puerta? ¿Acaso el motivo fue el que pudiesen entrar camiones y facilitar así el arrojar los escombros al interior del polideportivo?».
Además de los escombros que se acumulan, el grupo municipal de Ahora Getafe se ha interesado por la «prohibición de acceso a las instalaciones de las alimentadoras de la colonia de gatos que existe en el polideportivo, y sin embargo se permite que entren y salgan camiones».
Por último, desde AG se ha pedido información sobre el estado de los estudios para impulsar un nuevo polideportivo y cuándo se tiene previsto acometer los primeros trabajos.
El Gobierno Municipal ha contestado en parte con una nota de prensa en la que asegura que ‘su idea’ es derribar lo que queda del antiguo Polideportivo San Isidro tras la celebración del Festival de Cultura Inquieta que se celebrará ahí durante el próximo mes de julio. La construcción de las nuevas instalaciones, según tiene previsto la alcaldesa, se realizará por fases.
La obra de nunca acabar
El Polideportivo San Isidro se inauguró el 30 de abril de 1974. La instalación se cerró en el ocaso de la última legislatura de Pedro Castro como alcalde por obsoleta. Sara Hernández era primera teniente de alcalde.
Con la llegada del PP a la alcaldía se constató el desastre provocado. Soler llegó a decir que el Polideportivo se parecía a Kosovo, El nuevo gobierno Municipal planificó un proyecto que pretendía su integración en el popular barrio de San Isidro, aumentando el aparcamiento y acercando equipamientos inexistentes como la piscina cubierta. Sin embargo, el intento acabó en un repetido fracaso; salió a concurso varias veces y quedó desierto. Entonces, el mismo Soler acusó a ‘una mano negra’ de estar detrás del fracaso del proyecto. En aquellos momentos coincidían en la Delegación de Deportes Santos Vázquez, exconcejal de Deportes del PSOE, y la edila popular Carmen Plata. No se sabe si era una mano, dos o cuatro… El hecho es que Soler tenía la sensación de que «el pliego de condiciones que se había preparado, estaba hecho a posta para que nadie pujara».
Con el regreso del PSOE al gobierno Municipal, Sara Hernández se reencontró con el Polideportivo San Isidro donde ella misma lo dejó. Un solar con ruinas que solo sirve para ser la sede del Festival Cultura Inquieta, una iniciativa privada que cuenta con el apoyo incondicional del Ayuntamiento. ¿Esa es la única razón para el retraso de en un proyecto que lleva encima de la mesa de alcaldía más de seis años?
Según el edil de Ahora Getafe, Hugo Paternina, casi a punto de cumplir los dos años de la actual legislatura, «el polideportivo de San Isidro sigue exhibiendo una singular destrucción, indolencia y dejadez administrativa. Hasta ahora lo único cierto es que los vecinos y las vecinas siguen sin Polideportivo».
El polideportivo San Isidro es la viva estampa de las ruinas que provocaron la guerra de los Balcanes. Una especie de obra de ‘El Escorial’ getafense, el cuento de nunca acabar, por el tiempo que se tardará en edificar y, más difícil aún, en determinar el sistema de gestión para que de nuevo sea un espacio útil para el barrio y para Getafe.
Cuando acaben las fases de las que habla Sara Hernández, si todo va bien, ‘sin nuevas manos negras’, habrá pasado una década… o más. En esta legislatura, seguramente, ¿solo se acabará el aparcamiento en superficie? Algo es algo.