El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha otorgado una indemnización de más de 300.000 euros a los familiares de cuatro antiguos operarios de la fábrica de Uralita en Getafe que fallecieron tras estar trabajando durante años en contacto con el polvo de amianto.
De esta forma, ha rechazado el recurso de la Corporación Empresarial de Materiales de Construccion SA, contra la sentencia de fecha 1 de septiembre de 2016 dictada por el Juzgado de lo Social núm. 24 de Madrid, que estimaba parcialmente la demanda interpuesta por los familiares contra la empresa.
La sentencia, que aún no es firme, asegura que la responsabilidad de Uralita, «es absolutamente incuestionable, toda vez que ésta llevó a cabo durante más de 50 años una actividad que implicaba un riesgo evidente, como era la utilización del amianto en la fabricación de materiales de construcción, en cuyo polvo tienen su origen la enfermedad que padeció el causante».
Además, «no resulta suficiente para eludir su responsabilidad con que la empresa acredite que adoptó las medidas de protección que establecía la normativa en vigor, cuando éstas, como resulta evidente por el resultado producido, eran absolutamente insuficientes para evitar el resultado dañoso».