► El Centro de Atención Integral a Drogodependientes de Leganés, que atiende a unos 360 usuarios, lanza un SOS a la ciudadanía por la grave situación que provocará que no se cubra a partir del 2 de enero la jubilación del único médico del centro que además es su director.
ULEG, principal partido de la oposición y segunda fuerza política del ayuntamiento, alerta de la delicadísma situación en la que se encuentra el CAID de Leganés. Un centro socio-sanitario bajo mínimos en personal, en medios, en recursos y productos (ni para tiritas en el botiquín) fruto de una nefasta gestión del gobierno “socialista” de Santiago Llorente con la complicidad de las comparsas de la Franquicia de Errejón y del partido Cs gestionado desde Valdemoro y Rivas.
Este centro municipal, que atiende a unos 360 usuarios y tiene a unos 60 en lista de espera, agoniza ante la desesperación de unos magníficos profesionales que ni dando el 200% pueden hacer frente a la situación. La incompetencia del ayuntamiento es tal que incumple reiteradamente las obligaciones suscritas en el convenio con la Comunidad de Madrid que dejan en las arcas municipales unos 625.000 euros al año que no se dedican al CAID por lo que se ha llegado a tener que devolver dinero. “¿Quiere el alcalde que la Comunidad se quede con el CAID como con los bomberos?”, se preguntan desde ULEG.
El gobierno local deriva a usuarios fuera de Leganés. Como está sucediendo con los indigentes de la localidad, y ante la ruinosa situación del CAID, muchos pacientes están siendo derivados a otros municipios como Getafe, Alcorcón o Madrid, incluso a centros de gestión indirecta. Esto supone un enorme trastorno para los usuarios no sólo por las molestias que generan los desplazamientos y salir de su entorno, sino porque muchos de ellos son muy jóvenes sin posibilidades económicas para costearse el transporte o incluso son varios los pacientes cuya movilidad depende de una silla de ruedas.
“Nos parece indignante lo que está haciendo el PSOE con el CAID. Ya sabemos que siempre ha sido para ellos el patito feo, pero lo que está pasando se acerca a lo delictivo y demuestra una vez más el corazón piedra de este alcalde con todo lo relacionado con lo social, por mucho de izquierdas que se autoetiquete. Es tal el desastre de gestión que a día de hoy ni se sabe si se ha firmado el convenio con la CAM, se han paralizado los cursos de la unidad formadora, no se ha previsto cubrir al director que se jubila que además es el único que tiene el centro y que lleva años doblando funciones… Los trabajadores están enormemente preocupados y ya no saben ni qué hacer ni qué decir para que se les escuche, porque además siempre está presente el riesgo a represalias”, denuncia el portavoz de ULEG, Carlos Delgado.
