► Continúan vigentes los de la anterior legislatura del PP y su ausencia es debatida Pleno tras Pleno
► Polémica por el futuro de la Fundación Leganés para el Deporte
Leganés despide el curso político, al menos en cuanto a plenos ordinarios se refiere, con la falta de un presupuesto como protagonista. Salieron, por supuesto, en la sesión ordinaria del presente mes de julio. Es ya el Día de la Marmota del municipio pepinero. No en vano, por mucho que se insista, la inercia y los tiempos, cada vez más cercanos a mayo de 2019, orillan a pensar que en toda la legislatura los habrá. Efectivamente, el horizonte de unos nuevos que tumbasen el reinado de los ilegales, dicho por la Justicia, del PP, que son los que mandan y rigen, se antoja inverosímil. Sin embargo, ni siquiera se espera ya un mínimo, es decir, un proyecto; a la sazón un ínfimo síntoma que demuestre apetencia del Ejecutivo local por cumplir con su trabajo.
A partir de aquí, el camino sabido, pero que hay que contar. El Gobierno socialista se limita a excusarse y culpar a ULEG en “un bloqueo permanente a la ciudad”. En esa línea, el alcalde, Santiago Llorente, se refirió al señor Delgado, portavoz del partido independiente, como “antisistema que busca el bloqueo” y que “se mete en casa de todos, es destructivo”. Es prácticamente indigerible la expedición de circunstancias sin un argumento sólido. O lo que es lo mismo, un papel que demuestre hechos, y por tanto amores, de que el Gobierno cumple. Nadie se ha podido pronunciar en voto respecto a unas cuentas porque ni las han presentado. En respuesta, Delgado contestaba que “¿tengo yo alguna culpa de que usted no haya traído un proyecto de presupuestos? ¿Hemos secuestrado a su concejal de Hacienda? Tiene usted otros 21 concejales y ¿nos quiere hacer creer que son por nuestros seis ediles? Lideramos la Oposición y su discurso”.
Fundaciones: ¿sí o no?
Asunto con miga fue también la Fundación Leganés para el Deporte, que lleva sin operar más de un lustro. Este PSOE la quiere quitar, escudándose en las preguntas sobre ella provenientes del Tribunal de Cuentas, pero curiosamente quien la propició fue Gómez Montoya, exalcalde socialista. Sea como fuere, no cuesta, cierto es, pero no funciona. Y, según Llorente, “difícilmente va a tener actividad en el futuro”.
En su debate, Rocío Cruz relacionaba al Lega, la propaganda gratuita y las exenciones fiscales. “Fomentamos que el Lega tenga beneficios fiscales. En tres años no han manifestado nada, y ahora en tiempo de descuento… La pregunta es por cuánto. En determinadas cuestiones, este equipo de Gobierno mete el acelerador para según qué cosas”, expresaba la de Ganar Leganés.
Por su parte, Delgado tampoco entendía por qué se quita y proponía dejarlo en manos del próximo Ejecutivo, “que quizás quiera contar con ella”, mientras que José Manuel Egea de Ciudadanos señalaba que “pensaba que no existía, no se hace nada con ella. ¿En siete años no hubo acuerdos con empresas? No tiene servicio ninguno. El 70% se lo llevaban los cargos y el resto el deporte”. Terminó el asunto con los nombramientos de patronos.
En otro orden de cosas, ULEG propuso la creación de una delegación de Bien Estar Animal con el objetivo de reforzar la tenencia responsable de animales y luchar contra su maltrato. Los independientes aseguraron que si gobiernan “crearemos esta delegación”. Aprobado por unanimidad.
Además, se habló del uso del suelo público para la instalación de ascensores. Pudimos ver, de nuevo, cómo Leganemos lanza gestos naifs contra las edilas de Ganar Leganés o hacía suyo el eslogan de ULEG, pero con “Efecto Leganemos”.
Más allá de cuitas personales, pero que ciertos representantes gustan de dirimirlas en el salón de la democracia, Barbé, de Ganar Leganés, finalizó con una moción para implantar medidas de rehabilitación energética en los centros educativos.
