El genial título de la película de Sam Peckimpah sobre la cabeza de Alfredo García nos vale para intentar poner negro sobre blanco en la desaparición del busto de Ángel Torres de la Avenida Teresa de Calcuta tras las elecciones del 26 de mayo. En el film, el rico hacendado mexicano, El Jefe, descubre que su hija soltera está embarazada y que el padre de la criatura es Alfredo García; como venganza por la afrenta ofrece un millón de dólares a quien le traiga la cabeza del seductor. Una multitud de cazarrecompensas se lanzan a su captura. Se conoce finalmente que el tipo está muerto y enterrado; así que la única solución es arrancarle la cabeza al cadáver para cobrar la recompensa. La película, ahora considera una obra maestra de su director, fue tachada inicialmente de cruel, salvaje, esperpéntica y disparatada.
Como lo que pasa en Getafe. La película de Peckimpah nos ayuda, aunque solo sea por el título, a intentar explicar la desaparición del busto de Ángel Torres, presidente del Getafe CF SAD erigido en las inmediaciones del Coliseum getafense. Hay que recordar para los faltos de memoria que la iniciativa fue del exregidor socialista Pedro Castro que entre 2007 y 20011 se hinchó a colocar estatuas, efigies, placas y otros monumentos honoríficos.
Se nos antoja, también, que los motivos o razones que han motivado la desaparición del busto tengan su origen en la inquina de la alcaldesa, en la venganza por las afrentas recibidas durante la anterior legislatura, por demostrarle a ‘Pirri’ quién manda aquí y obtener como botín, por supuesto, la cabeza del indomable; también habrá influido el odio del ‘lechón’, la querella que interpuso y que casi manda a dos ediles y a la alcaldesa al andén político, la humillación sufrida al verse obligados a firmar el convenio para venderle el Coliseum, … Motivos sobran. El caso es que Ángel Torres no está muerto ni mal enterrado, sino vivo y coleando, triunfando en el fútbol y paseando de nuevo a su equipo por Europa de la mano de las televisiones. Poniendo el punto de Getafe en la geografía española y europea. Él mismo lo dijo: «alcaldes, hay muchos; presidentes de equipos de primera división, veinte».
Los hechos son rotundos e irrebatibles. El busto de Angel Torres y su pedestal sobre el que descansaba con el escudo del Club ha sido retirado siguiendo instrucciones, como no podía ser de otra manera, de Sara Hernández. Hemos preguntado a Torres esta misma semana. Según él, los operarios tenían la orden de retirarlo y… bueno, ¿tirarlo a la basura? ¿Dónde está la cabeza de Ángel Torres? Nadie lo sabe. ¿La habrán arrojado junto a la de su querido enemigo Craioveanu, escondida en algún almacén municipal de trastos viejos? No se sabe ¿Se lo comunicó la alcaldesa, quizá se lo habrían ofrecido para colocarlo en el estadio…? Que no, que no. Que nadie me ha dicho nada. Torres no solo critica a la alcaldesa y al gobierno municipal.. Sí, sí,… ¿Y la oposición qué ha dicho? Pío, pío. Hace dos años se especuló con la posibilidad de quitar el busto, desposeyéndole de tal honor, por su enfrentamiento con la Corporación a causa de la venta del estadio, un asunto pendiente de resolución.El monumento estaba ubicado en la fachada de una parcela municipal adosada al aparcamiento que da servicio al estadio del Getafe. Los terrenos fueron vendidos por el Ayuntamiento en el 2016. En ese ‘córner’ se han levantado un KFC [Kentucky Friend Chicken] y un FH (Foster Holliwood]. Sin embargo, a la vista del resultado final del proyecto, el busto no molestaba para la remodelación de la zona y además hay sitio suficiente en la acera como se puede comprobar en la imagen tomada este lunes.
El busto de Ángel Torres se erigió sobre un pedestal con el escudo del Club. Se inaguró el domingo 16 de diciembre de 2007, antes del partido que enfrentaría al Getafe con el Villarreal (que por cierto perdió 1-3).Durante la inauguración, el mandatario del Getafe, oriundo de Recas (Toledo) dijo que «si mi madre lo viese estaría muy orgullosa. Yo no soy de esta ciudad y es un orgullo que me hayan levantado una estatua a pesar de eso».
El lugar permaneció durante años olvidado de la mano de ‘dios’ y rodeados de basura hasta que en el año 2016 el Ayuntamiento enajenó la parcela [por algo más de un millón de euros] donde los nuevos propietarios han levando los dos establecimiento de comida americana.
Obra de José Martín Calderón
El busto desaparecido es obra del escultor José Martín Calderón, toledano de nacimiento aunque afincado en Getafe. El artista es autor, además de otras obras que adornan calles y espacios de nuestra ciudad como el busto de Miguel Hernández (Parque de San Isidro), el de César Navarro (jardín de la calle Leganés esquina a General Pingarrón), el de Clara Campoamor (Av. General Palacio esquina a Manzana), El sueño del maletilla (Plaza de Toros) o el bajorelieve de las puertas de la basílica del Cerro realizado con motivo de la apertura del Año Mariano de Getafe en 2010.
José Martín Calderón, de formación autodidacta en diversos seminarios se ha especializado en modelado, escultura, vaciado y relieve. Trabaja en colaboración con su hijo, Javier Martín Gómez, doctor en Bellas Artes especializado en Pintura.